lunes, 22 de abril de 2024

SEPTIMA SEMANA: La relación entre el periodista y sus fuentes.

 


Los periodistas no son testigos de todos los acontecimientos o de los hechos que informan.

Hay sucesos que se producen  sin que haya un periodista que den testimonio directo de lo ocurrido como una sesión parlamentaria, competencia deportiva, conferencia de prensa.

Es necesario que el periodista se informe previamente antes de reportear un hecho y de ser redactado como noticia.

Para ello hay que recurrir a las denominadas FUENTES INFORMATIVAS.

ENTENDEMOS COMO FUENTE INFORMATIVA TODA PERSONA QUE, A TÍTULO PERSONAL O COMO REPRESENTANTE DE UNA ENTIDAD PUBLICA O PRIVADA, TENGA EN SU PODER O CONOZCA DIRECTAMENTE UNA INFORMACIÓN Y QUE SE VEA EN SITUACIÓN DE COMUNICARLA A QUIEN ESTÁ EN POSICIÓN DE BUSCAR DICHA INFORMACIÓN.  NO HAY QUE CONFUNDIR LA FUENTE INFORMATIVA CON EL PROTAGONISTA DEL HECHO NOTICIOSO.


El protagonista del hecho noticioso (por ej, un accidente) se ve envuelto en el hecho, y el hecho puede ser percibido directamente por el periodista o por terceras personas.


Frente al requerimiento de dicha  información, la fuente puede estar: 


  • Obligada jurídicamente entregar dicha información, que es el caso de la mayoría de las llamadas fuentes públicas. 
  • En situación de proporcionar o no la información, dependiendo de su voluntad o de sus intereses, que es el caso de las llamadas fuentes privadas. 
  • Protegida jurídicamente para negarse a proporcionar la información requerida, por ejemplo, amparada por el secreto profesional.

Las fuentes en las rutinas periodísticas

El concepto de relación entre el periodismo y sus fuentes de información se desarrolla de forma especial desde la década de los años 70 donde la empezaron a analizar autores como Tunstall, Tuschman y Fischman, grandes referentes que nos han acompañado a lo largo del recorrido académico de los profesionales de la comunicación. 


Sin embargo, el concepto de fuente informativa hoy en día ha crecido en contenido y sobre todo y más importante ha evolucionado con la incorporación de Internet. 


Sin duda, las nuevas tecnologías nos permiten acceder a una inmensa cantidad de datos de una manera fácil y rápida ya que son muchos los expertos que aportan sus trabajos y los hacen públicos para la consulta libre a través de la red. Además, Internet también nos ofrece la posibilidad de contactar con especialistas de todo el mundo de forma sencilla para consultar o intercambiar opiniones, antes había que ir preguntando y así se iban componiendo las agendas de fuentes de los periodistas, fuentes valiosas que ahora ya se acumulan en las agendas telefónicas de nuestros teléfonos móviles y en el directorio de contactos de nuestros correos electrónicos.



En cualquier medio se dan criterios de valoración de las noticias y las etapas de producción como rutinas periodísticas. La posibilidad de que la construcción de la noticia se organice en una rutina facilita el trabajo y permite enfrentar más eficazmente una información de último momento.


La disponibilidad de fuentes confiables, productivas y accesibles son las condiciones básicas para el desempeño de la tarea periodística. Sin embargo, la relación de los periodistas con las fuentes en una rutina periodística se puede traducir en lealtades complejas y de “contratos” tácitos, tanto por parte del medio como de forma personal con los que alcanzar una supuesta exclusividad en un momento dado. La relación entre el periodista y la fuente está construida sobre la presunta confianza que entre ambos se establezca. Pero un abuso de confianza entre ambas partes puede llevar a la falta de rigor informativo y a caer en el intercambio de informaciones interesadas, provocadas o poco objetivas.


El hecho de que las agendas temáticas de un medio sean habituales provoca recurrir a fuentes productoras de información también habituales, y así los medios se aseguran de tener una continuidad y homogeneidad de los temas tratados. Y es aquí cuando suele olvidarse o dejarse en segundo plano la verificación de las fuentes, pues el trabajo organizado y rutinario, la agenda establecida, además del escaso tiempo del que se dispone, hace que no se contrasten las informaciones adecuadamente y se caiga en una “rutina” de información basada argumentos pobres y, en ocasiones, interesados. Por ello es beneficioso tener una serie de contactos o fuentes habituales de las que servirnos, en ocasiones, para contrastar o consultar posibles informaciones, pero sí es contraproducente una abundante confianza o una estrechez entre un periodista y la fuente.


La TESIS DEL PERRO GUARDIAN 

Habla del rol de la prensa dentro de una sociedad democrática. El periodismo como un actor obligado asumir la función de un watchdog, un animal alerta que ladra cada vez que identifica a un intruso. El periodismo "perroguardián" incluye alertar a otros cuando un problema es detectado (fraudes corporativos, toma de decisiones a nivel gubernamental, defensa del consumidor, etc.). 


La Primera Enmienda (Enmienda I) a la Constitución de los Estados Unidos prohíbe la creación de cualquier ley con respecto al establecimiento oficial de una religión, que impida la práctica libre de la misma, que reduzca la libertad de expresión, que vulnere la libertad de prensa, que interfiera con el derecho de reunión pacífica o que prohíba el solicitar una compensación por agravios gubernamentales. Fue adoptada el 15 de diciembre de 1791, como la primera de las diez enmiendas de la Carta de Derechos.

Varios modelos de la teoría de la comunicación han intentado de poner de relieve la estrecha dependencia que se produce entre el periodista y sus fuentes.


Los problemas en la falta de verificación

Ofrecer una información falsa o incompleta puede traer consecuencias no solo para el medio que publica esas informaciones, que puede ver dañada su credibilidad, sino para terceras personas que se vean afectadas por los contenidos que se deriven. Las consecuencias pueden variar y diferir mucho entre sí:


Publicando datos erróneos estamos desinformando a la audiencia, incumpliendo con uno de los valores clave del ejercicio periodístico.

Podemos perjudicar a terceras personas, llegando a vulnerar su derecho al honor, derecho a su intimidad personal y familiar y/o su derecho de imagen, recogidos en la Constitución y las leyes vigente. También es posible caer en injurias cuando la información no está bien contrastada y falta a la verdad de los hechos.

Qué son las fuentes


Es la vida social: los individuos, los grupos sociales y las instituciones tales como el gobierno, la Iglesia, las Universidades, el comercio, la prensa, los tribunales de justicia, los legisladores, los líderes de opinión.

En su dinámica social: son las relaciones sociales de conflicto y cooperación, la conducta y personalidad sociales, las costumbres, hábitos, tradiciones, actitudes y expresiones de los protagonistas de la sociedad.

Las fuentes de información son los abrevaderos de donde el periodista toma la información. Allí se origina la “Noticia”.

No se puede concebir una información sin una fuente pues es su origen y su fundamento.

En ella se apoya, el periodista para afirmar o negar la existencia de la noticia.

De las fuentes se recopilan: documentos; expresiones ( de las personas o voceros); u observaciones sobre actitudes y conductas de las personas, instituciones, grupos, y otros.


Total independencia entre la fuente y el periodista. 

Debiese haber  un distanciamiento natural entre el que produce la noticia y el que informa sobre la misma.


Las fuentes y el periodista cooperan. Fuente y periodista tienen algunos objetivos comunes: uno necesita que una determinada información se publique y otro necesita obtener noticias para satisfacer a sus superiores o para vender más periódicos. En determinadas ocasiones, las fuentes filtran una información que les interesa que aparezca y que los medios no se pueden resistir a publicar.


La fuente es la que prácticamente hace la noticia. Sería el caso de los comunicados oficiales. A partir de la proliferación de los gabinetes de prensa, aumenta la denominada “información convocada” en la que la fuente hace la noticia.

La relación entre el periodista y la fuente informativa en ocasiones puede ser motivo de conflicto; el mantenimiento del secreto profesional es un ejemplo de ello. La Deontología profesional periodística, como orden normativo, intenta regular estas relaciones.


Contrastar , Atribuir y Referir 


Necesidad de contrastar. Para relatar un acontecimiento, los periódicos de calidad y los buenos periodistas no recurren a una sola fuente informativa pues su información puede resultar sesgada, errónea o poco veraz, recurren a distintas fuentes para contrastar las informaciones ofrecidas por unas y otras.El hecho de que las agendas temáticas de un medio sean habituales provoca recurrir a fuentes productoras de información también habituales, y así los medios se aseguran de tener una continuidad y homogeneidad de los temas tratados. Y es aquí cuando suele olvidarse o dejarse en segundo plano la verificación de las fuentes, pues el trabajo organizado y rutinario, la agenda establecida, además del escaso tiempo del que se dispone, hace que no se contrasten las informaciones adecuadamente y se caiga en una “rutina” de información basada argumentos pobres y, en ocasiones, interesados. Por ello es beneficioso tener una serie de contactos o fuentes habituales de las que servirnos, en ocasiones, para contrastar o consultar posibles informaciones, pero sí es contraproducente una abundante confianza o una estrechez entre un periodista y la fuente.


Necesidad de atribuir. Es conveniente que el periodista revele al lector la fuente de la que ha conseguido el dato o el conjunto de informaciones que incluye en su noticia. Eso otorga credibilidad al texto. Tan solo puede ser ocultada intencionadamente en aquellas ocasiones en las que la fuente se niegue a que se revele su identidad o en las que el periodista pueda sospechar que la integridad de la misma peligra en caso de ser difundida. 

En estos casos, el secreto profesional ampara legalmente al periodista para proteger la identidad de sus fuentes.

En ocasiones las fuentes pueden proporcionar información off the record. Datos que se facilitan al periodista para que comprenda mejor determinado acontecimiento pero que expresamente se pone como condición que no sean publicados. En esos casos el periodista debe ser honesto con su fuente y cumplir su voluntad. 

Necesidad de referir. El periodista también puede introducir en la noticia declaraciones realizadas por los protagonistas del acontecimiento. Hay dos fórmulas para ello: la cita directa, en la que se reproducen textualmente las frases más significativas pronunciadas o escritas. Estas siempre irán entrecomilladas o en letra diferenciada para que el lector las identifique claramente. 

La otra opción es la cita indirecta, muy útil para resumir en pocas frases declaraciones largas. Con ellas el periodista ya no reproduce textualmente sino que se limita a sintetizar y explicar lo declarado. La manera de introducirlas suele ser con un "dijo que", "afirmo que", "declaró que". Resulta muy habitual la combinación en la misma noticia de la cita directa y la indirecta.

Ojo con las fuentes

En teoría pareciera que el interés de informar fuese exclusivo del periodista; pero en la realidad es que los actores sociales son los más interesados en opinar y dar a conocer lo que piensan en los medios de comunicación que  son los instrumentos de difusión para conservar, reformar, aclarar, modificar o cambiar la opinión y la imagen de la sociedad en que se vive.

Es a  través de su ideología y tomando en cuenta sus intereses económicos, políticos, sociales como los individuos e instituciones proporcionan información.

Ellos son los más interesados en proporcionar  información a los medios.

Así, la responsabilidad y función de informar es una corresponsabilidad entre fuentes, periodistas y medios  de comunicación.

Cuando saben más que los demás sobre determinado ámbito o materia en particular o son más  diestras que otras en una actividad. Lo que debe ser demostrable.

El buen periodista sabe distinguir  entre una fuente autorizada y la fuente con autoridad. 

La primera es a la legal y administrativamente se le adjudica esa autoridad. Ejemplo: las oficinas de prensa, de RRPP, de Comunicaciones.

No necesariamente una fuente autorizada tienen autoridad. No toda fuente tiene el conocimiento experto para opinar e informar de algo o de alguien.

Una fuente honorable y metódica, además de sabia, puede dar una cierta garantía de que informa con rigor y confiabilidad.


Cada periodista lleva a cabo estas fases con su propio sello, estilo y producirá para los diferentes medios notas informativas, crónicas noticiosas, reportajes, entrevistas o hacer comentarios sobre el quehacer nacional, internacional, político, económico, etc.

El periodista aplica este método de trabajo general con el objetivo determinado de: informar, opinar y explicar.  

Su método de trabajo que no es más que un conjunto de procedimientos, técnicas y herramientas se profundizará según sea el género periodístico en el que se aplique el trabajo periodístico.

Mientras más sistemático y riguroso sea el trabajo periodístico, mejor planeado, organizado y expresado, será más eficiente y la información será más oportuna, veraz, objetiva y sustantiva.

Es recomendable tener una metodología de trabajo, ordenada, sistemática y exigente con la entrega a los demás (puntualidad).


Primero es necesario tener un método de trabajo claro y preciso.

Diálogo abierto y claro con su editor periodístico ( ¿qué me están pidiendo?)

Planeación informativa. Es la capacidad  para avizorar la tendencia de los movimientos de una sociedad. 

Olfato para detectar dónde puede brotar una noticia.

Manejo de las “fuentes”. Conocimiento acabado de ellas. Cada periodista conoce el comportamiento de sus fuentes de información habituales.

Preguntar siempre si se tienen dudas sobre alguna información. Las noticias no son propiedad de nadie.

Tener iniciativa y no quedarse con lo que informa  “la oficina de prensa o el comunicado oficial”.

No olvidar que el periodista es fiel y sensible intérprete de lo que la opinión pública necesita conocer.

No dejarse llevar por la “fuente”  para terminar siendo un periodista partidista o tendencioso. 


Las fuentes en la era digital

https://www.lavanguardia.com/vida/junior-report/20201030/4969747102/fuentes-importantes-periodismo.html

Con la eclosión de las redes sociales, los mensajes que se difunden a través de Twitter o Facebook también se han convertido en fuentes de información. El caso más conocido es el del presidente Donald Trump , que se ha acostumbrado a lanzar noticias a través de su perfil de Twitter en lugar de organizar ruedas de prensa o encuentros con los periodistas.

En este caso, la cuenta de Twitter de Trump puede utilizarse para recoger declaraciones directas del presidente, aunque deberían contrastarse para comprobar su veracidad. Pero no todo lo que se publica en esta o cualquier otra red social es información oficial o puede usarse como fuente de información.

En el caso de las redes sociales, los periodistas deben ser incluso más estrictos en la validación de las fuentes y a la hora de contrastar la información.

Una de las mayores reticencias que despierta internet y los medios sociales como fuente de información es la relativa facilidad con la que se pueden falsear datos y suplantar identidades. Millones de personas son ahora capaces de publicar informaciones de cualquier tipo, desde cualquier lugar y sin límites. También pueden hacerse pasar por otras personas, difundir información inexacta o falsa, o fingir que están en un lugar estando en otro. Por esta razón los periodistas deben afinar sus habilidades para desenmascarar aquellas fuentes de información erróneas, ya sean malintencionadas o tan sólo equivocadas.

Las fuentes y el periodista cooperan. Fuente y periodista tienen algunos objetivos comunes: uno necesita que una determinada información se publique y otro necesita obtener noticias para satisfacer a sus superiores o para vender más periódicos. En determinadas ocasiones, las fuentes filtran una información que les interesa que aparezca y que los medios no se pueden resistir a publicar.

La fuente es la que prácticamente hace la noticia. Sería el caso de los comunicados oficiales. A partir de la proliferación de los gabinetes de prensa, aumenta la denominada “información convocada” en la que la fuente hace la noticia.

La relación entre el periodista y la fuente informativa en ocasiones puede ser motivo de conflicto; el mantenimiento del secreto profesional es un ejemplo de ello. La Deontología profesional periodística, como orden normativo, intenta regular estas relaciones.


Clasificación de las fuentes

Según la relación al objeto de conocimiento

La clasificación más extendida de la tipología de fuentes periodísticas es aquella que distingue entre fuentes primarias y fuentes secundarias, donde la diferenciación se basa en la relación con el objeto de conocimiento. Así, fuente primaria es aquella que está informada por su propia participación en el hecho noticiable, como parte participante o como testigo de lo que ha ocurrido.

Por su parte, la fuente secundaria es aquella que interpreta, pone en contacto y analiza las fuentes primarias. Esta clasificación permite distinguir el grado de manipulación al que ha sido sometida la información antes de llegar al periodista y ofrecerse a la audiencia.


Según el origen de la información

Un factor importante es la diferenciación entre la fuente de procedencia de la noticia y las diferentes fuentes que se consultan para la confección de la misma. Así se puede observar fuentes de origen de la información, que son fuentes de las que nace directamente la noticia. Por otro lado están las fuentes complementarias, que son aquellas que sirven para completar y contrastar la noticia.


Según el nivel de acceso

En función a la exclusividad del uso de la fuente se distinguen fuentes exclusivas del medio y fuentes compartidas. Para el medio de comunicación es garantía de reconocimiento el poder ofrecer una información en exclusiva que proviene de una fuente de la que tan solo ese medio puede beneficiarse. A veces no se trata solo de la exclusividad de la información sino de la fuente, que puede tener complementos de valor añadido.


Según la frecuencia de contacto

Otra característica que sirve para clasificar las fuentes es la temporalidad de la relación de la fuente con el medio. Según Mauro Wolf, las fuentes se clasifican en estables o provisionales. Las fuentes estables son aquellas que mantienen relaciones fijas con el medio, como por ejemplo una agencia de noticias. Las fuentes temporales o provisionales son las que se relacionan solo durante un cierto período o lo que dure la cobertura de un tema informativo concreto. Dentro de las fuentes temporales podemos diferenciar entre aquellas que han sido utilizadas una única vez y aquellas a las que, sin llegar a ser permanentes, se recurre más de una vez.

Según su grado de institucionalización

Otro baremo para clasificar las fuentes es aquel que las distingue según su grado de implicación institucional con el ítem informativo. En función de esta variable se distinguen entre fuentes oficiales, aquellas directamente relacionadas con la producción de la información (gobierno, ayuntamiento, asociación, ONG...) y fuentes no oficiales, las que aun teniendo su propio punto de vista o datos que aportar sobre el suceso no están ligados a su origen o carecen de una autoridad reconocida.

Según su identificación

Podemos establecer una categorización en función a la confidencialidad de la fuente: fuentes públicas y fuentes anónimas. Por fuente pública se entiende aquella que puede identificarse y definirse como origen o complemento de la información. Las fuentes anónimas son las que no podemos publicitar y que forzosamente han de quedar ocultas en el proceso de recolección informativa. El uso de las fuentes anónimas puede estar justificado cuando esta prefiere reservar su anonimato para protegerse de eventuales consecuencias negativas.


FORMAS DE RELACION ENTRE EL PERIODISTA Y SUS FUENTES

ON THE RECORD. Todo lo que la fuente y es de interés público dice el periodista lo puede citar. 


NOT FOR ATRIBUTTION

Atribución con reservas: Fuentes que actúan bajo la "regla de la reserva". La fuente no desea ser identificada, es decir, no quiere que aparezca su nombre directamente. Sin embargo, se pueden citar contextos y retransmitir palabras. Ejemplo: "Fuentes próximas al presidente aseguran que


ON DEEP BACKGROUND

Atribución con reserva obligada: Actúa bajo la regla del plagio. Se protege todavía más la privacidad y el anonimato de la fuente. Se oscurece el contexto en el que se ha obtenido la información y e escribe de forma que el periódico parezca haber obtenido los medios por otros medios. Ejemplo: "Este periódico ha podido conocer..."


Por su incidencia en el quehacer profesional observemos estos casos con más detalle. 


La información off the record

OFF THE RECORD 

Atribución de reserva total ("off the record"): Información dada al periodista con la única función de hacerle comprender lo ocurrido. En ningún caso puede publicarse. Es un aporte de datos más para el bagaje de información del periodista.


La actitud de la fuente

La actitud de la fuente puede afectar directamente a la información que se quiera publicar, ya que de la atribución que se dé a los datos conocidos dependerá, en mayor o menor grado, la fiabilidad de la información. Es posible diferenciar varios casos:


Información con atribución directa: el periodista tiene autorización para nombrar la fuente. Esta es la situación ideal porque aumenta la credibilidad y cuenta con un mayor valor informativo.

Información con atribución reservada: es el caso más frecuente. El periodista oculta la identidad de la fuente. Es una fórmula utilizada por las fuentes que ofrecen información “intoxicada”, por lo que será recomendable sospechar de ella y preguntarse por la intención o los intereses de la fuente.

Off the record: el periodista recibe una información confidencial no publicable. Es una información para uso exclusivo de él; sin embargo podrá hacer uso de ella si ha sido verificada por otras fuentes.

Miguel Gónzalez Pino planteaba un caso ilustrativo en un capítulo del libro “La Ética Periodística en el Nuevo Milenio”. En él expone un ejemplo que surgió en Chile tras las declaraciones de un obispo sobre temas políticos y su petición de tomarlo como una información off the record. A pesar de esa petición, un periodista de un diario local publicó la noticia y se abrió un amplio debate sobre esta forma de obtener la información. El director y los compañeros del periódico apoyaron la actuación del periodista, pero el obispo decidió presentar su queja al Consejo de Autorregulación. Finalmente se aceptó la denuncia y un consejo dictaminó el fallo: se había cometido una grave infracción ética y debía ser amonestado. Se consideraron algunos aspectos:

El ejercicio del periodismo se basa en un “contrato” tácito entre el periodista, su medio, los lectores y las fuentes.

El periodista que se haya comprometido a mantener en forma confidencial (“off the record”) hechos, informaciones u opiniones, no debe darlos a conocer ni pública ni privadamente. Esto implica que tampoco podrá compartirlos con persona alguna que pudiera divulgarlos. 

CUAL ES EL PRINCIPIO QUE ESTA AQUI EN JUEGO, QUÉ ES LO QUE EL PERIODISTA PROTEJE

El secreto de fuentes tiene una lógica muy sencilla, según Jonathan Peters del Columbia Journalism Review. Hay muchas personas que tienen acceso a información sobre corrupción, crimen o abuso de poder, que no hablarían públicamente por temor a represalias, pero si lo harían anónimamente por medio de la prensa.[https://www.clarin.com/politica/secreto-fuentes-pala-periodismo-desenterrar-datos-corrupcion_0_mL3jGlzLD.html]

“Así que se desarrollaron privilegios para proteger a los periodistas, ya que hay un interés público en la divulgación de información noticiosa”, dijo Peters. Si el periodista fuera forzado a revelar la identidad de sus fuentes, no tendría más acceso a ese flujo de información sobre las actividades ocultas del poder.

Entonces, los periodistas, al publicar la información, se convierten en los objetivos de los contraataques, y no sus fuentes.

El secreto profesional

Es el reconocimiento del derecho del periodista a no revelar alguna información, o la manera en que ha sido conseguida, para proteger a las fuentes, a sí mismo y a su ejercicio profesional. No significa únicamente que el periodista decida no publicar algunos datos sino que supone la posibilidad de ocultarlos si lo considera necesario. La FAPE (Federación de Asociaciones de Periodistas de España) lo define de la siguiente manera:

El secreto profesional es un derecho del periodista, a la vez que un deber que garantiza la confidencialidad de las fuentes de información. Por tanto, el periodista garantizará el derecho de sus fuentes informativas a permanecer en el anonimato, si así ha sido solicitado. No obstante, tal deber profesional podrá ceder excepcionalmente en el supuesto de que conste fehacientemente que la fuente ha falseado de manera consciente la información o cuando el revelar la fuente sea el único medio para evitar un daño grave e inminente a las personas.

Artículo 10 del Código Deontológico de la FAPE

En el ámbito del periodismo, la polémica acerca de cómo debe ser regulado o hasta qué punto debe ser respetado el secreto profesional ha sido su principal característica. La diversidad de opiniones e intereses al respecto hace que la discusión parezca no tener una solución universal. Desde que el artículo 19 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos fuese aprobado, el derecho al secreto profesional ha constituido una de las reivindicaciones tradicionales de los periodistas, con resultados diferentes en cada país. Ya es reconocido (aunque en distintos grados) por los ordenamientos jurídicos de la mayoría de los países democráticos con un sistema de prensa considerado independiente; no obstante, hay países como Francia, Bélgica, Gran Bretaña y algunos estados de Estados Unidos en donde se niega.


PERO HAY QUE ESTAR ATENTO, NO TODO SECRETO ES SECRETO PROFESIONAL

Es importante señalar que según esta obligación de confidencialidad que contrae el profesional sanitario con su paciente podemos distinguir varios tipos de secretos según las características propias y las circunstancias en las que se enmarque esta confidencia.

Los distintos tipos de secretos profesionales y sus diferencias radican en la forma en la que se compartió o descubrió dicho secreto y en la obligatoriedad o no de guardarlo. Basado en esto, contamos con:

El secreto natural: descubierto por casualidad, por investigación personal o por confidencia, y no puede divulgarse. Aunque no haya una promesa de guardar secreto, se está obligado a callar, en virtud del precepto moral que prohíbe perjudicar a los demás sin ningún motivo de razón.

El secreto prometido: nace de un contrato y de la promesa de guardar silencio después de haber conocido el hecho. Un mismo secreto puede ser a la misma vez natural y prometedor.

El secreto confiado: genera una promesa hecha antes de recibir la confidencia. El secreto pasa a ser estrictamente confidencial o profesional.

Un secreto es aquello que cuidadosamente se mantiene oculto o en reserva.

Las cosas a que se refiere la definición de secreto pueden ser materiales o inmateriales. Aunque, en propiedad, no son las cosas materiales las que constituyen el  secreto, sino que éste está constituido por el "conocimiento" que tales cosas existen y se hallan ocultas.  El secreto también conlleva la  idea de reserva, de ocultación, ignorancia o desconocimiento.

Por último, la palabra "cuidadosamente" supone la idea de una voluntad. Es voluntario en cuanto implica una decisión para mantenerlo o revelarlo. 

El objeto de todo secreto es mantener una cosa oculta, ignorada de todos o por lo menos, por algunas personas.

Los distintos tipos de secretos profesionales y sus diferencias radican en la forma en la que se compartió o descubrió dicho secreto y en la obligatoriedad o no de guardarlo. 

Desde el punto de vista de su naturaleza jurídica , el secreto profesional suele ser abordado y entendido de dos maneras.

El secreto profesional como producto de un contrato bilateral tácito entre el profesional y su cliente. 

El secreto como una institución de derecho público extracontractual. Se trata así de una obligación absoluta, de interés y de orden público que está por encima del interés privado de las partes.

El secreto profesional 

Un secreto es aquello que cuidadosamente se mantiene oculto o en reserva. En el ámbito profesional es el deber u obligación que tienen los miembros de ciertas profesiones (médicos, abogados, psicólogos) de no develar los hechos que han conocido en el ejercicio de su profesión. 

El secreto profesional comporta un compromiso ante todo moral y también legal de no contar a persona alguna, incluso un juez, aquello que fue informado confidencialmente. Dentro de las diferentes formas de secreto (natural, prometido, confiado), encontramos el llamado secreto profesional, es decir el compromiso contraído por el profesional de mantener en reserva el nombre o identidad de la fuente (secreto de la fuente), mantener en reserva lo revelado o informado (“off the record”) o respetar una determinada fecha y hora antes de difundir la información (embargo noticioso). Para los periodistas el secreto profesional constituye un derecho (más del 80% de los códigos deontológicos establecen la necesidad de contar con él), pues aunque en primera instancia, pareciera haber una limitación del derecho de informar (mantener en el anonimato a la fuente o no divulgar todo el contenido de la información), esta reserva le permite realizar su actividad con mayor tranquilidad y libertad, posibilitando el derecho del público a conocer toda la información. 

A nuestro juicio, el objeto moral del secreto, es la salvaguarda de la fuente ante eventuales peligros como atentados contra su integridad física, represalias en contra de su familia, la pérdida del trabajo o incluso la muerte. Esto permite, a su vez, que el periodista pueda tener acceso a cierta información, que de no mediar el secreto no le sería posible obtener. Si bien es cierto, como hemos dicho, el secreto profesional busca resguardar la integridad de la fuente ante eventuales amenazas, peligros o cualquier otra consecuencia negativa. También protege al periodista, quien puede negarse a entregar a otros medios o a un juez el nombre de su fuente, los temas o las circunstancias de la entrevista. Incluso, puede negarse ante el medio para el cual trabaja. Este derecho opera sólo en la medida en que es indispensable para el cumplimiento de su deber. 

A los periodistas no siempre se les ha reconocido esta prerrogativa, aunque en la actualidad la mayoría de los ordenamientos legales lo admiten. En Chile la ley de prensa sólo contempla en su artículo 7º el derecho a la reserva de las fuentes. Allí se establece que “los directores, editores de medios de comunicación social, las personas a quienes se refieren los artículos 5º y 6º y los corresponsales. También es aplicable al sacerdote en el confesionario, conocido como secreto de confesión. En ética se llama objeto (moral) o finis operis a aquello a lo que la acción tiende de suyo y en lo que termina, considerándolo en su relación con la norma moral. Con otras palabras, es el objeto inmediato del acto de la voluntad.

Dario Restrepo

10 pasos para ser un buen periodista

https://www.youtube.com/watch?v=YmjrpOl8kCk


En el ámbito profesional es el deber u obligación que tienen los miembros de ciertas profesiones (médicos, abogados, psicólogos) de no develar los hechos que han conocido en el ejercicio de su profesión. 

El secreto profesional comporta un compromiso ante todo moral y también legal de no contar a persona alguna, incluso un juez, aquello que fue informado confidencialmente. Dentro de las diferentes formas de secreto (natural, prometido, confiado), encontramos el llamado secreto profesional, es decir el compromiso contraído por el profesional de mantener en reserva el nombre o identidad de la fuente (secreto de la fuente), mantener en reserva lo revelado o informado (“off the record”) o respetar una determinada fecha y hora antes de difundir la información (embargo noticioso). 

Para los periodistas el secreto profesional constituye un derecho más del 80% de los códigos deontológicos establecen la necesidad de contar con él), pues aunque en primera instancia, pareciera haber una limitación del derecho de informar (mantener en el anonimato a la fuente o no divulgar todo el contenido de la información), esta reserva le permite realizar su actividad con mayor tranquilidad y libertad, posibilitando el derecho del público a conocer toda la información. A nuestro juicio, el objeto moral76 del secreto, es la salvaguarda de la fuente ante eventuales peligros como atentados contra su integridad física, represalias en contra de su familia, la pérdida del trabajo o incluso la muerte. 

Esto permite, a su vez, que el periodista pueda tener acceso a cierta información, que de no mediar el secreto no le sería posible obtener. Si bien es cierto, como hemos dicho, el secreto profesional busca resguardar la integridad de la fuente ante eventuales amenazas, peligros o cualquier otra consecuencia negativa. También protege al periodista, quien puede negarse a entregar a otros medios o a un juez el nombre de su fuente, los temas o las circunstancias de la entrevista. Incluso, puede negarse ante el medio para el cual trabaja. Este derecho opera sólo en la medida en que es indispensable para el cumplimiento de su deber. 

En ética se llama objeto (moral) o finis operis a aquello a lo que la acción tiende de suyo y en lo que termina, considerándolo en su relación con la norma moral. Con otras palabras, es el objeto inmediato del acto de la voluntad. 

En un lenguaje coloquial sería a lo que “apunta” dicho acto, considerado en si mismo. Acompañan también al acto moral, el finis operantis o intención del agente y las circunstancias que atenúan o agravan la bondad o maldad el acto. 52 extranjeros que ejerzan su actividad en el país, tendrán derecho a mantener reserva sobre su fuente informativa, la que se extenderá a los elementos que obren en su poder y que permitan identificarla y no podrán ser obligados a revelarla ni aun judicialmente”. Esta especie de “secreto” se hizo extensivo “a las personas que, por su oficio o actividad informativa, hayan debido estar necesariamente presentes en el momento de haberse recibido la información” (idem), por ejemplo, camarógrafo, sonidistas, fotógrafos y demás personal técnico. Esta extensión nos parece absolutamente necesaria. La mencionada ley, precisa que este derecho sólo rige para “quienes estén en posesión del respectivo título universitario, reconocido válidamente en Chile, y aquellos a quienes la ley reconoce como tales” (Art. 5º). Respecto del Código Civil no existe una disposición expresa sobre el secreto profesional para los periodistas.

Por su parte, el código de ética de los periodistas chilenos, estipula en su artículo noveno: “El periodista debe citar sus fuentes, pues el lector tiene derecho a conocerlas y así evaluar por sí mismo la calidad de las mismas. Sólo debe silenciarlas si ellas se lo pidieren - previa confirmación de su idoneidad y confiabilidad -, respetando así la confianza otorgada al entregársele antecedentes reservados” y agrega en el artículo décimo: “el periodista que se haya comprometido a mantener en forma confidencial (off the record) hechos, informaciones u opiniones, no debe darlos a conocer ni pública ni privadamente. Esto implica que tampoco podrá compartirlos con persona alguna que pudiera divulgarlos”. Es casi una constatación banal recordar que el periodista no debería presionar, sobornar o chantajear a la fuente para obtener información. Tampoco debe obligarla a que se identifique. Sí puede en cambio, persuadirla de que acceda a identificarse, garantizándole ciertas reservas. Es de gran importancia que el periodista se mantenga fiel a su compromiso. De lo contrario, la fuente perderá la confianza y no seguirá entregando información que puede ser muy valiosa. 

El secreto profesional deriva del derecho a la información, pues supone el derecho de investigar y recolectar información, y a su vez, esto implica el acceso a las fuentes. Esta “abastece” al periodista, quien se compromete a guardar silencio si es que la fuente así lo requiere. Para que el flujo informativo no se rompa, es necesario que ambas partes respeten sus compromisos. Romper el secreto injustificadamente puede ser una gran imprudencia.

Recomendación de lecturas:

https://fundaciongabo.org/es/etica-periodistica/recursos/12-principios-periodisticos-para-la-proteccion-de-las-fuentes-anónimas

https://intelectual.org/aspectos-legales-en-artes-y-medios/etica-legalidad-como-citar-fuentes-correctamente-periodismo/


LECTURA ASOCIADA A ESTA LECCION

Nariño, P. A. (2004). la relación entre los periodistas y sus fuentes. Un abrebocas para la discusión. Obtenido de https://espacioculturayarte.files.wordpress.com/2016/02/la-relacic3b3n-entre-los-periodistas-y-sus-fuentes.pdf




martes, 9 de abril de 2024

SEXTA SEMANA: Objetividad, principios editoriales y cláusula de conciencia

 





Empresa periodística.  Los medios de comunicación son sistemas técnicos utilizados para llevar a cabo cualquier tipo de comunicación. Estos medios pueden ser tanto masivos (dirigidos a las masas) como interpersonales  (facilitan la comunicación entre individuos o grupos).

Los Medios Masivos de Comunicación son aquellos que brindan información o contenidos a las masas.

Los medios de comunicación, son canales de distinta naturaleza que ofrecen información que se pone el alcance del público a través de distintos recursos tecnológicos. Se suelen organizar como empresas. 

La empresa periodística es una organización que se dedica a la producción y difusión de noticias, información y contenidos relacionados con los acontecimientos actuales. Estas empresas operan en el ámbito de los medios de comunicación y desempeñan un papel crucial en la sociedad al proporcionar información veraz y relevante.

Los medios de comunicación, como la prensa escrita, la radio, la televisión e Internet, son los canales a través de los cuales las empresas periodísticas difunden su contenido. Las empresas periodísticas son las responsables de generar, seleccionar y presentar la información que se transmite a través de estos medios. La relación entre las empresas periodísticas y los medios de comunicación es fundamental para garantizar la difusión efectiva de las noticias y la construcción de la imagen corporativa.

La evolución de la empresa periodística muestra al menos dos características: 

1) es un sector de rápido desarrollo y 2) es un sector muy dependiente del cambio tecnológico. 

Se observan algunas tendencias: 1) Hay una tendencia hacia la concentración, ya sea mediante la adquisición de medios de comunicación por parte de grupos financieros, o su traspaso al poder gubernamental y, 2) Hay una tendencia hacia la atomización de los medios (reducción de tamaño de los equipos, reducción de precio de los equipos, reducciones de personal involucrado)


Vamos a observar la primera de ellas con algo más detalle


 Tendencias hacia la concentración

EMPRESA PRIVADA

La  concentración de la propiedad en la empresa informativa se refiere al proceso mediante el cual un número reducido de individuos, organizaciones o grupos controla una parte significativa de los medios de comunicación. Esto puede afectar la diversidad de voces y perspectivas en la información que se difunde y, en última instancia, influir en el pluralismo informativo.

En el contexto de las empresas periodísticas, la concentración de la propiedad puede llevar a un monopolio ideológico, donde una única visión o enfoque prevalece en la cobertura de noticias. Esto puede limitar la libertad de expresión y dificultar que la ciudadanía forme opiniones informadas y plurales sobre los temas de debate público.

La concentración de la propiedad en las empresas informativas es un tema relevante para garantizar la diversidad y el acceso a información veraz en una sociedad democrática.

¿Qué impacto social produce la concentración informativa? 

La concentración de la propiedad en manos de pocas compañías es una realidad en el mundo del periodismo contemporáneo. Para Estados Unidos por ejemplo, 20 empresas dominan 61 millones de periódicos que se venden diariamente, igual número de compañías controlan las 11,000 revistas del país, tres compañías controlan la industria de la televisión, 10 compañías hacen lo propio para las estaciones de radio, 11 compañías controlan las grandes editoriales que producen los libros del país.

Sin embargo, hay que recordar que Estados Unidos tiene leyes contra el monopolio empresarial y obliga a la transparencia a los gobiernos corporativos. Del mismo modo, muchos países han generado leyes que protegen el pluralismo, evitando la propiedad cruzada de los medios. Nadie podría afirmar que -pese a la concentración- Estados Unidos no goza de una prensa pluralista, con infinidad de voces. 

La concentración de la propiedad en los medios de comunicación tiene diversas consecuencias que afectan tanto la diversidad informativa como el acceso a una variedad de voces y perspectivas. A continuación, algunas de las principales consecuencias:

1.Menos Diversidad de Expresiones:

   - Cuanto menos dueños o "gatekeepers" controlen los medios, menor será el número de voces en el sistema.

   - Esto puede resultar en una homogeneización del discurso y limitar la pluralidad de opiniones y enfoques.

2. Filtrado de Información:

   - Los medios pueden no difundir ciertas informaciones que no se alineen con los intereses de sus propietarios.

   - Esto afecta la objetividad y la imparcialidad en la cobertura de noticias.

3. Uniformización de Contenidos:

   - La concentración de propiedad puede llevar a la uniformización de los contenidos en diferentes medios.

   - Esto reduce la variedad de perspectivas y enfoques disponibles para el público.


4. **Exclusión de Competidores Débiles**:

   - Grandes grupos de medios pueden intentar excluir del mercado a competidores más débiles o nuevos actores independientes.

   - Esto afecta la competencia y la diversidad de opciones para los consumidores.


5. **Influencia en el Sistema Político**:

   - La concentración de propiedad otorga mayor influencia en el sistema político.

   - Los medios pueden ejercer presión o favorecer a ciertos actores políticos.

Se estima que la concentración de la propiedad en los medios puede tener efectos significativos en la calidad y diversidad de la información que llega al público, así como en la salud de la democracia y el acceso a una comunicación plural y veraz.

Se le suele asociar con la perdida de credibilidad de la prensa. Así, una prensa concentrada en pocas manos sería una prensa menos creíble. Los críticos de la presencia de capital privado en la prensa (generalmente representativos del meinstream de la izquierda académica frecuente en las escuelas de Periodismo) suelen argumentar con estas ideas. No hay estudios empíricos que la sustenten. 

Una prensa concentrada, sin embargo, es un mejor negocio. Un buen negocio en el periodismo puede hacer frente a las presiones del Estado y su tendencia histórica a limitar la propiedad privada en los medios.


PROPIEDAD PUBLICA

La concentración de la propiedad de los medios de comunicación en manos del Estado o los gobiernos es un fenómeno que puede tener implicaciones significativas en la libertad de prensa, el pluralismo informativo y la diversidad de voces en una sociedad. A continuación, exploraremos algunas de las consecuencias y características de esta concentración:


1. Control Estatal de los Medios

   - Cuando el Estado o el gobierno posee o controla directamente los medios de comunicación, puede influir en la agenda informativa y limitar la independencia editorial.

   - Esto puede llevar a la promoción de una única perspectiva oficial y restringir la diversidad de opiniones.


2. Propaganda y Sesgo Político:

   - Los medios estatales pueden ser utilizados como herramientas de propaganda para promover la ideología del gobierno en el poder.

   - La información puede estar sesgada a favor del partido o líder gobernante.


3. Restricción de la Libertad de Prensa:

   - La concentración de la propiedad en manos del Estado puede dificultar la existencia de medios independientes y críticos.

   - Los periodistas pueden enfrentar presiones para autocensurarse o alinearse con la narrativa oficial.


4.Monopolio de la Información:

   - Cuando el Estado controla la mayoría de los medios, se crea un monopolio de la información.

   - Esto limita la competencia y la diversidad de fuentes de noticias.

La concentración de la propiedad de los medios en manos del Estado o los gobiernos puede afectar la calidad de la información disponible para el público y la salud de la democracia. Es fundamental mantener un equilibrio entre la propiedad estatal y la independencia de los medios para garantizar una sociedad informada y plural.

La tecnología favorece la idea antigua de One Media One Man Newspaper, una pequeña empresa periodística ha sido una constante histórica de nuestra actividad. La tendencia al minifundio informativo suple los vacío dejado por la concentración de grandes medios. La concentración también los afecta. Especialmente aquello de poner en una sola mano la función de redactor, jefe de redacción, diseñador, diagramador, gerente de circulación, director, cajero, etc. La mezcla de intereses periodísticos y comerciales también está presente. 

Cuáles son los deberes éticos de un periodista con su empresa. 

Pertenecer a una empresa informativa es también un asunto de mística. Pero también es un medio para ganar dinero y hacerle un bien a la comunidad. Todos y cada uno de los miembros de la empresa periodística deben tener el sentido de luchar por una misma causa

https://www.rcnradio.com/especiales/la-bomba-contra-el-espectador-30-anos-despues

Cuáles son los fundamentos éticos de la solidaridad del periodista con su empresa .

a. Deber de disponibilidad: el periodista tiene la obligación ética de darle lo mejor de sí mismo a su empresa. Y sólo obliga estar constantemente disponible, con un médico con sus pacientes. 

B. Deber de lealtad. El periodista debe ser leal no su empresa, y también con la dirección y los propietarios deben respetar la entidad intelectual y profesional del periodista. En algunos países los empresarios, gerentes y empleados de empresas periodísticas tienen las mismas responsabilidades éticas que el informador: debilitar todo compromiso que ponga en duda la independencia informativa y medio, de indiferencia con claridad todo el material publicitario informativo

Independencia del periodista. Los periodistas ingleses se negaron a participar en maniobras de desinformación pedidas por el alto mando británico durante la guerra de las Malvinas. Los militares impidieron el acceso de la prensa al frente de batalla. 

La prensa de Estados Unidos se negó a apoyar a las fuerzas armadas norteamericanas cuando invadieron Granada. Ambos casos ponen en evidencia que la independencia frente a los poderes es una actitud fundamental para un buen periodismo. La verdad y la independencia están por encima de todo. La objetividad-independencia es una actitud personal que permite estar más allá de cualquier dependencia o predeterminación Del juicio.

Qué compromiso ponen en duda la independencia informativa. 

La principal es obligar a los periodistas a conseguir avisos comerciales de sus programas. Lo contrato, pero si me consigue aviso. Esto incluye el financiamiento estatal. Consecuencias: A. Se limita la posibilidad de un análisis independiente y libre del acontecer. B. Se pierde la independencia la información. C. Se rompe el equilibrio informativo.

Joseph Pulitzer world de NY Quiera Dios que esta casa sea el hogar de un periódico siempre insatisfecho con la publicación de las noticias, que siempre lucha contra toda forma de mal, que sea siempre independiente. 

En el periodismo independencia es igual a coraje, fortaleza.

Cuáles son las principales dependencias que pueden limitar a un periodista. Éstas dependencias pueden proceder de:  A) organización financiera del medio de comunicación, de sus limitaciones económicas, de sus fuentes de financiación, de medidas restrictivas impuestas por los gobiernos, de la gestión de los editores, de la presión de las audiencias o de la relación de los periodistas con sus fuentes. B) limitaciones externas: cuando quien proporciona el financiamiento: créditos bancarios o contratos de publicidad, pretenden imponer sus condiciones a la empresa misma o a sus productos como estrategia para conseguir sus fines, fines que son distintos a los de los medios de comunicación. 

Pero la relación dinero-independencia tiene distintos significados. Pulitzer: Los diarios deben tener gran circulación, ya que sus noticias y comentarios deben llegar al mayor número posible de personas y, porque la circulación es igual a masa aviso, los avisos significan dinero y el dinero significa independencia. roy howard: ningún diario puede conservar su independencia editorial si deja de ser económicamente independiente. 

Tal como los medios de comunicación deben ordenar sus finanzas para mantener su independencia, el periodista debe organizar su economía personal y familiar de modo que no corra peligro su libertad. La austeridad en el modo de vida es una fuente de independencia para el periodista. Los códigos de ética coinciden en rechazar los regalos, las dádivas, los honorarios no procedentes del trabajo informativo, los premios otorgados por eventuales fuentes informativas, las invitaciones, viajes y obsequios. La empresa periodística tiene responsabilidad de mantener un nivel decoroso en las remuneraciones de sus periodistas con el fin de garantizar su independencia. Su sueldo debiera permitirle vivir sin necesidad de acudir a otras fuentes de ingreso. Los códigos regulan la aparición de periodistas en actividades de publicidad y relaciones públicas

Cómo pueden llegar a ser los gobiernos un límite para la independencia de la prensa. Ningún gobierno acepta ser autor de medidas de control o de censura para la princesa. Siempre le darán razones de interés público para censurar. El informe McBride de 1981 explica que los gobiernos se justifican por razones ideológicas y políticas, económicas y financieras y, Morales.

Aunque los gobiernos defienden en teoría la independencia de los periodistas, en la práctica no encuentran inconveniente y excesiva. El político considera su posición y sus ideas como absolutas; el periodista sabe, que esto es un relato entre muchos. El político necesita el periodista por su capacidad de llegar a las audiencias, pero ojalá que sea permeable a sus ideas. 

El periodista se sitúa frente al político como un actor clave de la vida social. 

James Gordon Bennett: No apoyaremos a ningún partido político ni seremos órgano de fracción o camarilla alguna y tampoco nos importan en absoluto  elección o candidato alguno, desde presidente a alguacil.

El periodista ha de ser  radical en su independencia, especialmente lo que se refiere a posiciones políticas. En América Latina esta relación ha sido equivoca. De allí la dificultad para entender y asumir una independencia total. Países gobernados por políticos de izquierda es complejo el tema porque se promueve la idea de qué son los partidos políticos (en el fondo un Partido Político) lo que orientan a la prensa y el trabajo de los periodistas. 

Lenin: La labor periodística debe de manera indefectible y obligatoria, estar indisolublemente vinculados con otros aspectos de la vida del partido. Un periodista matriculado profesionalmente un partido político pierde independencia. Pero también tenemos un corazón, que puede hacer el periodista para mantener la independencia frente a sus propios sentimientos y opiniones. Los códigos insisten en separar las opiniones personales de la información y rechazan como una práctica contraria a la Ética la presentación de opiniones junto con los datos de una información, sin diferenciación alguna. 

Walter Cronkite: no hay un solo hombre que pueda verdaderamente decir que no guarda en su pecho prejuicios, parcialidades y fuerte sentimiento de pro o en contra de alguno, sino de todos los temas del día. Y, sin embargo, constituye la marca distintiva del periodista profesional estar capacitado para dejar a un lado sus opiniones personales al informar sobre los sucesos de cada día.

En qué forma influye la independencia del periodista en su relación con las fuentes de información. Código de ética coinciden en que el periodista de ir adoptar una posición crítica frente a las fuentes, confrontarlas y comprobar sus afirmaciones. Debe ético de mantenerse independiente de las fuentes. Autoridad de la fuente no exime al periodista de la tarea de comprobar los datos que recibe. El periodista ha de ser leal con el público más que con sus fuentes. La lealtad y con la verdad, no necesariamente con la fuente.

Desde el punto de vista ético esta realidad implica nuevas relaciones entre periodistas y sus empresas. La evolución a la concentración de los medios de comunicación han llevado, por ejemplo, a una menor diferenciación entre sectores que han estado tradicionalmente separados: la parte comercial y la parte periodística, que ahora parecen más entre mezclados e Interdependientes Este cambio provocaría una omisión de noticias que afectan a las empresas del grupo dueño de los medios de comunicación, la tendencia de entrevistar a personalidades afines y un aumento de separata comerciales o productos publicitarios que se mezclan con noticias. 

El periodista (codificador-mediador-canalizador) es un operador semántico que actúa como un agente al servicio del publico, para seleccionar y transmitir no-intencionalmente mensajes que están normalmente fuera del alcance del sujeto colectivo para quien trabaja. 

Para que haya noticia periodística, el primer requisito es que unos emisores-codificadores seleccionen y difundan determinados relatos para hacerlos llegar a unos sujetos receptores, que aguardan dichos mensajes con la esperanza de hallar en ellos una satisfacción inmediata o diferida de sus necesidades informativas, mediante la cual consiguen elaborar un cuadro de referencias personales validas para entender el contexto existencial en que viven.

“En un principio la noticia periodística se definió como la comunicación a un público interesado de un hecho que acababa de producirse o de  anunciarse a través de unos medios de comunicación masivos. 

El conocimiento de noticias debía ser el reflejo de una realidad que tenía  que describirse, explicarse e interpretarse a los receptores para que pudiera formarse la   opinión pública... 

Los medios no tardaron en recibir críticas al considerar que ofrecían una realidad parcial o deformada que no se limitaba a ser un mero reflejo de lo que ocurría.   Fueron acusados de falsear la realidad y de ofrecer interpretaciones erróneas” (Mar de Fontcuberta).

El sentido de la verdad en el periodismo

Afirmar, hoy en día, que el periodista se debe guiar por la verdad no es una obviedad, habida cuenta de algunas tendencias periodísticas actuales. Ya no se habla tanto de la verdad objetiva como paradigma a seguir en el periodismo, sino, de la “sinceridad subjetiva 

con la menor carga posible de responsabilidad” (Blázquez). Ya no se trata de informar de acuerdo a la “realidad”, sino de “crearla”, “ construirla” de acuerdo a los intereses y gustos del público. Ya no interesa tanto que la noticia sea verdadera, sino que sea interesante,  “golpeadora”, conmovedora. Para estas tendencias, la verdad informativa no es la adecuación entre lo visto y lo comunicado, sino la “realidad” que el propio medio fabrica y transmite como  una obra exclusiva suya.

A la mentalidad “post-modernista” -llevada a la información- no le preocupa si la noticia es verdadera o falsa, sino si se está de acuerdo o en desacuerdo con ella. Así ni los actos humanos ni las personas son susceptibles de un juicio ético. Sólo gusta o no gusta. 

El respeto a la verdad es uno de los principios más nombrados en los códigos deontológicos. El periodista colombiano Javier Darío Restrepo dice:  los periodistas son por antonomasia “los profesionales de la verdad”. Sin embargo, en la práctica no siempre se advierte tal compromiso.

Por el contrario, se observa una pérdida del sentido de la verdad (informativa), es decir, aquella “compuesta” por la verdad gnoseológica (adecuación entre la inteligencia y la cosa) y la verdad moral (adecuación entre lo pensado y lo comunicado). En consecuencia, la verdad informativa debe entenderse como la adecuación entre lo visto, conocido o investigado y lo comunicado o difundido a través de los mcs. En este sentido, es una verdad “segunda”, por cuanto la adecuación del entendimiento no es con la realidad, sino con un conocimiento previo a ella, o sea, con el mensaje previamente adecuado a la realidad por el periodista. La verdad periodística es, entonces, una cierta adecuación que alcanza el periodista (emisor) al conocer la realidad y que comunica con objetividad al público (receptor). En este contexto la información emerge como una verdad compartida, que se hace común por comunicación.

La verdad informativa responde, además, al sentido etimológico de la expresión, que proviene del griego aletheiea y significa “descubrimiento”, “develamiento”, en el sentido de descubrir lo que está más allá de lo aparente. Esta expresión pasa al latín como veritas, apuntando a la idea de “adecuación con”, “rectitud”, “concordancia”.

Para que la verdad informativa se lleve a la práctica, se requiere de ciertas virtudes del informador, como la veracidad (que es una cualidad del sujeto que lo dispone positivamente a decir la verdad), es decir, aquella disposición positiva del periodista a transmitir siempre, lo más fielmente posible, la verdad y, por lo tanto, no se debe confundir con la “verdad de los hechos”. 

Admitimos que conocer la verdad de los hechos no es fácil, pero tampoco imposible. El periodista puede, aunque con esfuerzo, conocerla con bastante exactitud. Nos parece importante destacar este punto, pues al interior del mundo periodístico hay diferentes actitudes respecto de ella. 

La actitud escéptica, por ejemplo, que encuentra asidero en la década de los 50 y 60 con el llamado periodismo “underground” y “nuevo periodismo”, especialmente en EE.UU., quienes postulan que la verdad es imposible de conocer. Ante esto, sólo queda refugiarse en el mundo de lo aparente o de la ficción, que es más eficaz que la verdad. Aquí encontramos fórmulas pseudoperiodísticas que proponen la ficción como remedio para una realidad que es incognoscible. En este ámbito, literatura y periodismo se confunden, perdiendo con ello sus respectivas fronteras. Desde esta perspectiva se produce la paradoja de que el periodista inventa para decir la “verdad”.

Emblemático es el ya clásico caso de la periodista Jeanette Cook, periodista del Washington Post, que recibió el premio Pulitzer en 1981 por su reportaje Jimmis’s World., Cook inventó la historia de un niño llamado Jimmi, de ocho años de edad, adicto a la heroína y maltratado por sus padres.

En este contexto, hacer periodismo es interpretar la realidad. 

LINEA EDITORIAL Y LA CLAUSULA DE CONCIENCIA

¿Qué pasa si entra en colisión la objetividad del periodista con la línea editorial de la empresa informativa?

Partamos por el principio. Una empresa informativa es una organización cuya función principal es recolectar, procesar y distribuir información a través de diversos medios de comunicación, ya sean impresos, audiovisuales o digitales. Esta información puede ser de interés general o especializado y puede abarcar distintos ámbitos, como la política, la economía, la cultura, el deporte, entre otros.

Las empresas informativas pueden tener diferentes formas, desde grandes conglomerados multimedia que abarcan distintos medios de comunicación y territorios, hasta pequeñas publicaciones independientes que se enfocan en temas específicos o regiones particulares. En este sentido, existen medios que se dedican exclusivamente a la prensa escrita, otros que se enfocan en la televisión o la radio, y otros que han adoptado un modelo multimedia que incluye plataformas digitales.

Además de la recolección, procesamiento y distribución de información, las empresas informativas también pueden llevar a cabo otras actividades relacionadas con el periodismo, como la investigación, el análisis, la opinión y el entretenimiento. Asimismo, estas organizaciones también pueden contar con diferentes áreas, como la redacción, la edición, la producción, el diseño, la fotografía, la publicidad y el marketing, entre otras.

En la actualidad, las empresas informativas enfrentan grandes desafíos debido a la transformación digital y los cambios en los hábitos de consumo de información. Los medios tradicionales se han visto obligados a adaptarse a las nuevas tecnologías y plataformas digitales para llegar a un público cada vez más diverso y exigente. En este contexto, las empresas informativas han tenido que replantear su modelo de negocio y buscar nuevas fuentes de financiamiento para garantizar su sostenibilidad a largo plazo.

La historia del periodismo señala una tendencia clara a considerar la publicación de periódicos como un negocio. Antiguamente se necesitaba muy poco para publicar un diario


1835 James Gordon Bennett, Herald de NY 

500 dólares. 2 sillas y un cajón

1841 Horace Greeley. Tribune 

1000 dólares

1851 Henry Reymond, NY Times

100 mil dólares


Hoy día cualquiera puede publicar un diario, siempre que disponga del capital necesario.


La historia del periodismo muestra también que la publicación de diarios ha seguido la tendencia de crecimiento de la industria moderna. 


IMPRENTA TRADICIONAL——´PEQUEÑA SOCIEDAD EDITORIAL—GRAN SOCIEDAD ANÓNIMA


La naturaleza misma de la empresa periodística demanda una organización muy compleja, pero que necesita, al menos dos lados: el editorial y el administrativo.

Aunque no existe una forma única de organizar una empresa periodística todos los periódicos grandes y pequeños tienen seis divisiones generales

1ejecutiva, maneja la administración general de la compañía editora. Suele consistir en una junta directiva, un presidente-editor o un propietario-director . 

2 editorial, se encarga de redactar el periódico, se preocupa de proporcionar el material escrito y gráfico . 

3 administrativa:Obtiene el dinero que las otras divisiones gastan, controla la circulación la promoción y la venta de un periódico.

4 mecánica, maneja la composición material del periódico, imprentas rotativas etc. 

5 auditoría, se encarga de la contabilidad facturas, créditos, contratos etc. 

6. Sector servicios, desarrolla cuatro funciones principales, limpieza, garajes, almacén y entrega del periódico.

CONCEPTO Y CONTENIDO DE LOS PRINCIPIOS EDITORIALES
La multiplicidad de términos y conceptos utilizados para referirse a los elementos que constituyen la esencia de la mismidad de la empresa informativa dan prueba de la dificultad para aprehender dicha realidad. 

Los principios editoriales de una empresa informativa son un conjunto de directrices éticas y deontológicas que establecen las normas y valores que rigen la labor periodística en una organización. Estos principios guían la selección, producción y difusión de noticias y contenidos periodísticos, y son esenciales para garantizar la calidad y la veracidad de la información que se difunde.

Los principios editoriales suelen incluir aspectos como la búsqueda de la verdad, la objetividad, la imparcialidad, la independencia y el respeto a los derechos humanos y los valores democráticos. También pueden establecer normas específicas en relación con la selección de fuentes, la verificación de los hechos, la corrección de errores y la protección de la privacidad y la dignidad de las personas.

Además de estos valores y normas éticas, los principios editoriales también pueden incluir directrices sobre la estructura organizativa de la empresa informativa, la gestión de recursos humanos y financieros, la relación con los lectores y la sociedad en general, y la participación en debates públicos y políticos.

En definitiva, los principios editoriales de una empresa informativa son fundamentales para garantizar la calidad y la veracidad de la información que se difunde, y para mantener la confianza y el respeto de los lectores y la sociedad en general. Además, estos principios son esenciales para garantizar la integridad y la dignidad de los periodistas, así como su capacidad para ejercer su labor con independencia y responsabilidad social.

Principios ideológicos; línea editorial; idea empresarial; contenido informativo de la publicación; orientación y formas de pensamiento; razón de ser; identidad del contenido editorial; principios generales inspiradores; fines ideológicos; línea
de pensamiento, son los conceptos más utilizados en la actualidad.

Sea cual fuere la terminología elegida, existe también una evidente dificultad para aproximarse a la definición del concepto y sus contenidos, hasta el punto de que hallar una definición generalmente aceptada para esta idea es todavía una de las tareas pendientes en la investigación especializada.

En términos generales, la definición varía dependiendo del objeto de observación.
Si atendemos principalmente al medio, esto es, al soporte instrumental que permite a la empresa cumplir su finalidad de difusión informativa, los principios editoriales pueden definirse como aquellos principios que afectan a la configuración del producto informativo. 

Los principios editoriales de una empresa informativa se enfocan principalmente en la ética y la deontología del periodismo, estableciendo normas y valores que guían la selección, producción y difusión de noticias y contenidos periodísticos. Estos principios se enfocan en garantizar la calidad y veracidad de la información que se difunde, así como en mantener la confianza y el respeto de los lectores y la sociedad en general.

Por otro lado, los principios ideológicos de una empresa informativa se enfocan en la orientación política, social y cultural que adopta la empresa en su labor periodística. Estos principios se enfocan en establecer la línea editorial de la empresa, definiendo sus posturas políticas, ideológicas y culturales.

Es posible que los principios editoriales y los principios ideológicos de una empresa informativa estén relacionados o incluso que se solapen en algunos aspectos, pero no son equivalentes. La línea editorial de una empresa puede influir en la selección y enfoque de las noticias que se publican, pero los principios editoriales deben prevalecer sobre los principios ideológicos en lo que se refiere a la ética y la deontología periodística. Es importante que una empresa informativa mantenga una clara separación entre sus principios editoriales y sus principios ideológicos para garantizar la calidad e integridad de su labor periodística

De manera más concreta, Hugo Aznar los define de la siguiente manera: «Conjunto de principios formulados explícitamente por la empresa y destinado a inspirar la filosofía, el planteamiento y los objetivos generales del medio que promueve, así como a orientar en cierta medida sus pautas de funcionamiento cotidianas» 

Si nos despegamos del producto para elevar la observación al conjunto de la empresa, los principios editoriales pueden ser denominados «principios configuradores», concepto acuñado por Nieto e Iglesias y que abarca una realidad más amplia que la del medio de comunicación, para abarcar y proyectarse sobre la totalidad de la organización empresarial. 

Los principios configuradores son definidos por estos autores como «el conjunto de conocimientos determinados que inspiran los contenidos informativos y fundamentan la estructura y actividad empresarial»


Francisco Iglesias, por su parte, aporta una definición que aproxima las dos visiones expuestas al incluir en la misma tanto al medio de comunicación como a la empresa informativa responsable del mismo: «El ideario de un medio de comunicación, o conjunto de ideas y pensamientos principales que resumen su razón de ser, puede tener

una ajustada expresión en lo que también se conoce como principios editoriales o principios configuradores. En estos casos, la palabra principios se refiere al origen y fundamento intelectual de la empresa; el término editoriales significa que esos principios no permanecen

inéditos u ocultos sino que se hacen públicos y se dan a conocer; el vocablo configuradores expresa, por su parte, la capacidad de dar figura peculiar a la empresa, aportando unidad y distinguiéndola de otras».


¿A quién corresponde formular los principios editoriales? Sin lugar a dudas, al empresario de la información esto es, a la persona física o jurídica titular de la empresa, cuya primera decisión y facultad debe ser precisamente ésta de definir los elementos identificadores, la razón de ser de su proyecto empresarial. Es la tarea esencial y primera del empresario de la información, como señalan Nieto e Iglesias:


«La experiencia enseña, con implacable constancia, que si la primera decisión del promotor no es concretar las ideas que servirán de cimiento a toda la tarea de difusión informativa, la empresa nace deforme. 

El mayor riesgo de la empresa es la incertidumbre sobre qué se quiere difundir y a quién se quiere hacer llegar» 


Ahora bien, los principios así formulados sólo pueden convertirse en realidad viva y vivificadora de la empresa y del medio de comunicación en la medida en que son asumidos por los profesionales que trabajan en el mismo



LA SINGULARIDAD DE LA EMPRESA INFORMATIVA

¿Qué clase de empresa es la empresa informativa? ¿Es diferente de cualquier otro tipo de empresa? ¿Deben exigírsele condiciones especiales en su actividad, organización o finalidad? De manera muy general, pueden señalarse cuatro rasgos claramente distintivos de las empresas informativas

En primer lugar, la empresa informativa se diferencia de cualquier otra Por el hecho de que el producto que se genera de su actividad es un bien de extraordinaria relevancia social en cuanto que es objeto de un derecho humano fundamental, el derecho a la información, que nuestra Constitución reconoce.

EL TRABAJO DE LOS PERIODISTAS

Además de por la naturaleza de su producto, la especificidad de la empresa informativa radica también en la naturaleza del trabajo intelectual mediante el cual se genera dicho producto, un proceso de producción que podríamos calificar de «mentefactura» por oposición a «manufactura» , que exige por parte de la organización empresarial en la que se integran los profesionales que desarrollan dicho trabajo, el reconocimiento y respeto de su independencia y autonomía en el desempeño de sus funciones profesionales.

 Esta independencia viene requerida y se justifica precisamente por la labor de intermediación del periodista con el sujeto titular del derecho a la información, esto es, cada persona individual, cada ciudadano susceptible de recibir libremente la información generada igualmente en un contexto de libertad de investigación y difusión. La independencia del periodista es, por tanto, una característica identificativa de su actividad y, en consecuencia, un derecho que los profesionales deben exigir no sólo frente a los poderes públicos sino también ante La empresa. Esta exigencia cobra una importancia mayor cada día en la medida En que crecen también las presiones sobre los profesionales, provenientes Fundamentalmente del ámbito de las propias empresas y sus propietarios y de la dinámica de un mercado que tiende a fagocitar y sacrificar la calidad informativa en el altar de la maximización de audiencias, la reducción de costes y la optimización de los beneficios empresariales.


LIBERTAD DE EMPRESA

En tercer lugar, la vinculación directa entre el producto de la actividad periodística y el sistema de libertades públicas sobre el que se sostiene y al que a su vez da sustento, exige libertad empresarial y de mercado, esto es, un entorno abierto en el que la actividad del empresario de la información pueda desarrollarse de manera igualmente libre. En palabras de Alfonso Nieto, «no habrá libertad de prensa allí donde no haya libertad de empresa periodística» , presupuesto que implica por una parte la libertad de creación de empresas periodísticas y por otra la libertad de elección de la forma jurídica que desee adoptar la empresa, sin que pueda existir verdadera libertad de empresa si se establecen limitaciones a alguna de ambas condiciones. Abundando en lo anterior, el reconocimiento de las características diferenciadoras de la empresa informativa o empresa de comunicación, evidenciadas más arriba, abre el debate en torno a si a este tipo de empresas corres-ponde un estatuto igualmente difernciado o si por el contrario deben estar sometidas al derecho común de todas las empresas.


D) DOBLE FINALIDAD

Finalmente y como consecuencia de todo lo anterior, la empresa informativa no tiene como finalidad única la obtención de beneficios, sino también la difusión de información, de manera que su misión última, la finalidad de su actividad sólo se cumple en la medida en que ambos fines coexisten de manera indisociada. «El dilema no es información o beneficios —explica Carlos Soria—. El verdadero problema de las empresas informativas, su talón de Aquiles, el desafío planteado a empresarios y periodistas, es éste: información, sí; beneficios, también»

Los principios editoriales

En el primero de los libros de Nieto Tamargo, El concepto de empresa periodística3, que constituye un jalón intelectual en el camino por él abierto para conceptualizar científicamente la empresa de prensa, después de referirse al objeto de la empresa (y antes de estudiar en el mismo capítulo los elementos personales, los medios económicos y las relaciones comerciales), abre un epígrafe con el título principios editoriales. Pone ahí estos principios en estrecha relación con la finalidad,no indeterminada, sino concreta, que persiga una empresa periodística (Nieto, 1967). El promotor que inicia la organización de su idea empresarial (habla Nieto en ese momento de promotor más que de empresario) tiene como primera tarea "la determinación de los principios ideológicos que presidirán el contenido informativo de la publicación que pretende editar". Esas "orientaciones y formas de pensamiento" serán las que precisamente cualifiquen a la publicación. Con otras palabras, lo que el promotor de la empresa debe concretar es "la razón de ser" del periódico o de la revista, es decir, lo que se puede denominar también "línea editorial".


Lo que quiere decir, y dice, es que la adhesión del lector viene determinada por su identificación con la línea editorial y el contenido

de la publicación, y que este contenido tendrá un mayor asentimiento de la colectividad en

tanto en cuanto esté más próximo a la idea de libertad e independencia.

Deja apuntadas el autor finalmente, en ese breve texto que estamos comentando, dos ideas

que son reflejo de su pasión por la libertad, y que volveremos a encontrar en sus escritos posteriores.

La primera: que los principios editoriales deben ser propuestos, no impuestos por el promotor; la segunda –que considera, además, un principio fundamental en la empresa de prensa– es que, tras la libre aceptación, los principios editoriales deben ser compartidos por las personas que trabajan en la redacción4. En ese sentido tienen los periodistas una especial posición en la empresa periodística: "los equipos de personas que componen la redacción materializan la idea de edición identificándose con el promotor o empresario en la realización de esta tarea" (Nieto, 1967: 76).

Poco más dice sobre los principios editoriales en este su primer libro. Pero de lo que dice cabe deducir:


A. La importancia y trascendencia, no sólo intelectual, sino también operativa y práctica de los principios editoriales en la empresa periodística.


B. La finalidad de la empresa periodística es la difusión de informaciones e ideas; la publicación La finalidad de la empresa periodística es la difusión de informaciones e ideas; la publicación –periódico o revista– es medio instrumental para esa difusión.


C. Por el objeto específico de aquel libro inicial y su contexto, es lógico que Alfonso Nieto se refiera entonces sólo, y en concreto, a la empresa de prensa y, dentro de ella, especialmente al producto periodístico: periódico o revista. Más adelante tendremos ocasión de estudiar en qué momento y circunstancias, aquel planteamiento germinal se desarrolla y plasma ya no sólo con relación a la empresa de prensa sino para la empresa informativa en general, y no sólo en el ámbito más reducido del producto periodístico sino también en otros decisivos campos y aspectos de la empresa de comunicación.

La cláusula de conciencia

Como es conocido, la doctrina de la cláusula de conciencia suele mantener que el objeto de ésta es defender y garantizar la libertad de espíritu y la independencia de los informadores, con base en la eminente dignidad y relevancia social de la profesión informativa. Nieto estudia en aquellas páginas la naturaleza de la profesión de informador y el estado doctrinal y legal de la cláusula de conciencia, y se detiene especialmente en el caso francés: "aunque ya existían precedentes en la legislación italiana, sin embargo la doctrina es unánime en atribuir a Francia el mérito de recoger en texto legal el conjunto de derechos a favor del periodista conocidos con el nombre de ‘cláusula de conciencia’" (Nieto, 1977: 193).

Los principios editoriales, cauce para la libertad informativa

Lejos de limitar o coartar la libertad del informador, los principios editoriales encauzan esa libertad,al tiempo que facilitan la coherencia entre las tareas de informar y los fines de la empresa.


La línea editorial raras veces se encuentra en un texto que una junta aprueba y que se conserva en alguna caja fuerte como la fórmula secreta de algún producto.


C o n c e p t o

Se llama línea editorial de un medio, A la orientación permanente de sus publicaciones: intencionalidad de sus editoriales, selección de sus columnistas, personajes que se entrevistan o que se silencian, hechos que se destacan o que se omiten, enfoque habitual de las noticias. Para descubrir esa línea editorial, como para conocer el carácter de una persona, es necesario un seguimiento crítico de sus ediciones o emisiones y de sus reacciones frente a los hechos. Si se trata de adoptar una línea editorial, los responsables del medio de comunicación deberán responderse sobre su intencionalidad: ¿quieren un medio dedicado al deporte? ¿A las noticias? ¿Al entretenimiento? ¿A la cultura? ¿a la política? ¿A la economía? ¿A la religión? ¿A la farándula?


Definido el objetivo central y preferente, deberá resolverse el de los medios para obtener y presentar los materiales. Es lo que suelen presentar los medios en sus manuales de estilo que son la expresión de la línea editorial del medio.


Desde el unto de vista ético la definición editorial de un medio resuelve de antemano los dilemas éticos que genera una agenda difusa o indefinida. Una agenda definida es una toma de posición, implica una decisión ética y unas reglas de juego claras, susceptibles de acuerdos o desacuerdos, de examen y de discusión.


EL INFORMADOR NO ES UN EMISOR QUE CON ABSOLUTA AUTONOMIA EMPRESARIAL  COMUNICA SUS IDEAS Y NOTICIAS AL SUJETO UNIVERSAL DE LA INFORMACIÓN .  EN EL PROCESO EMPRESARIAL EL PERIODISTA INFORMA DE ACUERDO  CON LOS PRINCIPIOS EDITORIALES DE LA PRENSA –LIBREMENTE PACTADOS Y ACEPTADOS- ENTRE EL PERIODISTA Y LA EMPRESA EN LA QUE LABORA.


El medio de comunicación es una empresa que, necesariamente, tiene una tendencia ideológica. Esta línea editorial puede ser cualquiera que el empresario quiera darle, sin perjuicio de las limitaciones que imponga la legislación, por ejemplo en Chile, la Constitución Política garantiza a todas las personas en su artículo 19 número 16 la libertad para desarrollar cualquier actividad económica, que no sea contraria a los supuestos que la norma contempla, como son aquellos casos en que la empresa y sus fines sean contrarios a la moral, a la seguridad o la salubridad públicas, o que lo exija el interés nacional , de este modo, el empresario podrá establecer la línea editorial o los principios editoriales, que serán base de toda su actividad empresarial, dentro de este amplio margen que establece la propia Constitución.


Al estar el profesional de la información vinculado a la empresa por un contrato de trabajo, no actúa éste de manera absolutamente libre e independiente dentro de la misma, sino que debe hacerlo de manera coherente y armónica con los principios que ella sigue. La empresa informativa es una “entidad integradora, en donde el profesional tiene un compromiso cierto de integración” (Bel, Corredoira y Cousida, 1992, pp. 263), esto se justifica plenamente si se tiene en mente que los mencionados principios editoriales los ha fijado la empresa con anterioridad a la contratación del periodista; la línea editorial es previa y claramente definida, parece imposible que, al contratar con ella, el profesional ignore el compromiso ideológico que deberá mantener en su labor. De esta manera, debe suponerse que el profesional acepta estos principios y, es más, se identifica con ellos, porque de no hacerlo deberá entenderse que por propia voluntad traiciona su conciencia y, en esta situación, no podría operar la cláusula de conciencia. El grado de identificación con estos principios es de difícil determinación y de suyo un tema de gran 

extensión, a modo de síntesis y siguiendo al profesor Nieto Tamargo , se propone que el grado de identificación debe no solo ser de absoluta imparcialidad, porque de lo contrario se trataría de un fraude social respecto de los destinatarios de la información. 


Toda empresa tiene una función o un rol que cumplir. De hecho, los teóricos le llaman “misión” al objetivo que justifica la existencia de la misma. Hay un sentido innato del lucro, en el cual se busca obtener un beneficio en función de una inversión original. En otro tipo de rubros, ello quedo mucho mas claro. Dentro de su razón de ser está el de obtener dinero a través de la venta de algún producto o servicio. Las organizaciones sociales, también definidas como empresas, escapan un poco de ello, ya que lo buscado puede muchas veces estar más cerca de la razón de ser de las organizaciones sociales. Las empresas periodísticas pueden estar un poco en cada uno de estos estamentos. Un medio puede buscar un rédito desde el punto de vista contable, pero también puede ser un buen “negocio” aunque los egresos superen a los ingresos. Esto se explica fácilmente cuando la intención es la de transmitir una ideología (aunque esta sea de ecología o política) y el beneficio está solo en generar un cambio en la sociedad. Esto explica que el periodismo sea la mas política de las profesiones. Durante siglos, el periodista y el político iban permanentemente asociados. De hecho, la profesión dominante entre los dirigentes del siglo XIX era esa profesión, la que en los tiempos actuales ocupa el abogado (debido a la judicialización del manejo de lo público). Esto pone en crisis el de pretender que el periodismo independiente sea una realidad. Podemos hablar de profesionales o empresas autónomas, pero no necesariamente (y de hecho no lo son) de independencia. Siempre existe dependencia de una subjetividad, ya que en la información la neutralidad u objetividad es una pretensión pero no una realidad concreta. 



http://www.komunicacion.com.ar/CdeCO_Unidad_6_LaEmpresaPeriodistica.pdf


La cláusula de conciencia puede sin duda ser encasillada como un supuesto de objeción de

conciencia, en específico, como una objeción laboral. El que se trate de un deber jurídicoprivado, representado por la relación laboral, por el contrato de trabajo entre el periodista y la empresa, es equivalente de todas maneras al deber jurídico objetable, es decir, el deber emanado de la relación contractual es el deber jurídico objetable. Esta objeción consiste en que por motivos morales, es decir, de conciencia, no otros, el periodista se opone al cumplimiento de un deber contractual, el informador se niega a informar de acuerdo con una ideología contraria a sus principios, a sus convicciones, ante este panorama, tiene 2 opciones:

• se niega a informar, o lo hace según sus convicciones, las que por ser contrarias o diferentes a las del medio de comunicación no son publicadas o son modificadas, o; • solicita la rescisión del contrato con la empresa.


Anguita Ramírez, Pedro. El Derecho a la información en Chile. Análisis de la Ley 19.733 sobre Libertades de Opinión e Información y Ejercicio del Periodismo. (Ley de Prensa). Lexisnexis, Chile. 1era edición enero 2005, pp. 276. 


cifuentes Correa, N. M. A. (2008). La Cláusula de Conciencia Periodística en Chile. (Licenciatura en Ciencias Jurídicas y Sociales), Universidad Austral de Chile, Valdivia. Retrieved from https://bibliotecadigital.indh.cl/bitstream/handle/123456789/824/Tesis-2014.pdf?sequence=1&isAllowed=y#:~:text=Se%20ha%20se%C3%B1alado%2C%20en%20el,(Roca%2C%201993%2C%20pp. 


sábado, 30 de marzo de 2024

QUINTA SEMANA. La verdad, la verdad informativa, la objetividad y el criterio ético del informador. 2024

 


Quinta semana de clases. LA VERDAD INFORMATIVA

UNIDAD I

La distorsión de la realidad por parte de los medios de comunicación se refiere al fenómeno en el que los medios de comunicación, ya sea intencionalmente o no, manipulan o distorsionan la información para que se ajuste a una determinada agenda o narrativa. Esto puede incluir la selección de ciertas historias para la cobertura mediática, la manipulación de imágenes y la omisión de información relevante.

La distorsión de la realidad puede tener consecuencias negativas, como la promoción de estereotipos, la creación de miedo y la influencia en la opinión pública y en la toma de decisiones.

En los últimos diez años, muchos autores han abordado este tema. Por ejemplo, en su libro "Posverdad: Cómo los medios de comunicación sociales están moldeando nuestra realidad", Matthew d'Ancona argumenta que la tecnología y los medios de comunicación están cambiando la forma en que percibimos la realidad y que los hechos objetivos se han convertido en algo cada vez más difícil de identificar.

La verdad, la verdad informativa, la objetividad  y el criterio ético del informador 



ACTIVADOR

¿Qué es lo que en última instancia se conoce del mundo real? 


¿Conocemos las cosas como son o son como nosotros las conocemos? 


Estas preguntas tocan el corazón de la filosofía y la ciencia cognitiva. En última instancia, lo que conocemos del mundo real es una interpretación que nuestros cerebros hacen de los datos sensoriales que recibimos. Nuestros sentidos nos proporcionan información sobre el mundo, pero es nuestro cerebro el que interpreta estos datos y construye nuestra percepción de la realidad.


En cuanto a si conocemos las cosas como son o si son como nosotros las conocemos, esta es una cuestión que ha sido objeto de debate durante siglos. Algunos filósofos sostienen que hay una realidad objetiva independiente de nuestra percepción, mientras que otros argumentan que nuestra percepción y comprensión de la realidad están moldeadas por nuestras experiencias y contextos individuales³⁴.


Por ejemplo, la teoría del conocimiento de Platón distingue entre el mundo sensible, que es el mundo tal como lo percibimos, y el mundo inteligible, que es el mundo de las ideas o formas perfectas³. Según Platón, no se puede obtener conocimiento verdadero del mundo sensible, solo opinión³.


En resumen, lo que conocemos del mundo real es en última instancia una interpretación de nuestros cerebros basada en los datos sensoriales que recibimos. Nuestra percepción de la realidad está influenciada tanto por la información objetiva que recibimos del mundo exterior como por nuestras experiencias y contextos individuales.

Para sobrevivir en el universo, los sujetos cognoscentes (seres capaces de conocer) debemos crear en nuestra mente “representaciones” mentales de los que nos rodea. Estas representaciones son conocimientos, explicaciones y creencias  a cerca de nosotros mismos y nuestro entorno. Podemos decir que construimos modelos o mapas mentales que corresponden en mayor o menor medida con la realidad.

Decimos que una apreciación es SUBJETIVA cuando depende del sujeto que experimenta e interpreta su entorno. Si digo este reloj es muy elegante, se trata de una apreciación subjetiva, pues la apreciación de la elegancia dependerá de la persona que lo observa, sus gustos y experiencias. En cambio, decimos que una observación es OBJETIVA  cuando está basada enteramente en el objeto observado, Por ejemplo, es objetivo decir que este reloj pesa 125 gramos, pues estoy haciendo una observación de una característica que depende del objeto, independientemente de quien la haga, cuando la haga o que experiencia haya tenido antes.  

Así, decimos que una observación es VERDADERA cuando corresponde con la realidad. Cuando corresponde con la realidad del sujeto es una verdad subjetiva; y si corresponde con la realidad del objeto será una VERDAD objetiva. Y si no corresponde, decimos que es una falsedad o mentira.  

 El conocimiento es siempre una relación o un vínculo entre el sujeto que conoce y algo conocido que denominamos objeto. Sujeto y objeto son los elementos esenciales de todo conocimiento. Para que haya conocimiento es necesario que el sujeto tenga la intención de conocer, así como es imprescindible también que exista algo que pueda ser aprehendido por el sujeto. Cuando el objeto del conocimiento es de una naturaleza ideal, como los objetos de la lógica Y de las matemáticas, el problema en cierto modo se simplifica, puesto que los objetos ideales son producto de nuestro propio pensamiento. La cuestión se plantea de modo más directo con relación a los objetos naturales, físicos y psíquicos.


El problema de la verdad y la objetividad, empero, ha enfrentado a filósofos y pensadores a lo largo de toda la historia. 


El problema de la verdad y la objetividad ha sido objeto de intensos debates filosóficos a lo largo de la historia, involucrando diversas posturas que reflejan la complejidad del tema. Veamos algunas de las principales posturas entorno a este asunto:


1. Realismo Ingenuo:

   - Esta postura sostiene que existe una realidad objetiva independiente de la percepción humana. La verdad se encuentra en la correspondencia directa entre nuestras afirmaciones y los hechos del mundo exterior. Se asume que es posible alcanzar un conocimiento objetivo y verdadero de la realidad.


2. Constructivismo:

   - Los constructivistas argumentan que la verdad es construida por la mente humana y, por lo tanto, es subjetiva. Consideran que la realidad es interpretada y filtrada a través de nuestras estructuras cognitivas y culturales, lo que da lugar a múltiples verdades construidas socialmente.


3. Escepticismo:

   - Los escépticos cuestionan la posibilidad de alcanzar verdades absolutas o conocimiento objetivo. Argumentan que la percepción humana es limitada y que nuestras afirmaciones sobre la realidad siempre están sujetas a dudas. El escepticismo pone en tela de juicio la certeza absoluta.


4. Pragmatismo:

   - Desde la perspectiva pragmática, la verdad se evalúa en función de su utilidad práctica. Lo que funciona o es eficaz en la resolución de problemas es considerado como verdad. La verdad está relacionada con la eficacia y la utilidad más que con la correspondencia con una realidad objetiva.


5. Relativismo Cultural:

   - El relativismo cultural sostiene que la verdad y la objetividad son relativas a la cultura y la perspectiva individual. Cada cultura o grupo puede tener su propia verdad, y no hay estándares universales para evaluar la validez de las afirmaciones.


6. Coherencia:

   - La teoría de la coherencia sugiere que la verdad se encuentra en la coherencia interna de un conjunto de afirmaciones. Si las afirmaciones son consistentes entre sí y forman un sistema lógico, se consideran verdaderas. Esta perspectiva destaca la importancia de la consistencia lógica más que la correspondencia con la realidad.


7. Construccionismo Social:

   - El construccionismo social argumenta que la realidad y la verdad son construcciones sociales compartidas. Se enfoca en cómo las creencias y conocimientos son moldeados por las interacciones sociales y las estructuras de poder, influyendo en la formación de verdades aceptadas por la sociedad.


8. Posmodernismo:

   - El posmodernismo desafía la idea de una verdad única y objetiva, argumentando que las narrativas y discursos son socialmente construidos. Critica la pretensión de conocimiento absoluto y sugiere que las verdades son contingentes y contextualmente determinadas.


Estas posturas representan solo una muestra de la diversidad de perspectivas en torno al problema de la verdad y la objetividad. La complejidad del tema ha llevado a un continuo diálogo filosófico y epistemológico a lo largo de la historia.

TENEMOS DOS OPCIONES DE CAMINOS POR RECORRER
Realismo
Idealismo


 El realismo
El realismo científico es la visión filosófica de que el universo descrito por la ciencia es real independientemente de cómo se pueda interpretar. Por lo que es una variedad del realismo crítico que sostiene, básicamente (i) que existe una realidad objetiva, (ii) que el objetivo primordial de la ciencia es describir y explicar (además de predecir) los hechos de la realidad y (iii) que la ciencia consigue su objetivo en cierta medida y de un modo especial, gracias a la aplicación del método científico. Bajo estas premisas, hay variedades de realismo científico en relación a autores realistas científicos, los cuales hacen énfasis en diferentes características de esta concepción.

Entre los filósofos que han defendido diversas variedades de realismo científico pueden mencionarse el argentino Mario Bunge

¿Qué es el realismo en la filosofia?
En la filosofía moderna el término realismo se aplica a la doctrina que manifiesta que los objetos comunes percibidos por los sentidos, como mesas y sillas, tienen una existencia independiente del propio ser percibido. En tal sentido, es opuesto al idealismo de filósofos como George Berkeley o Immanuel Kant.

Es la orientación o actitud espiritual qué implica la preeminencia del objeto coma (res = cosa) , en razón de su afirmación fundamental de que nosotros conocemos cosas. Se refiere a la cosa reconocida como independiente de la conciencia. Los idealistas, en cambio, se aferran a la idea de que no conocemos cosas, sino representaciones de cosas o las cosas en cuanto representadas. 

El realismo es la actitud natural del espíritu humano, es la actitud del hombre común que no se plantea el problema de la adecuación entre las nociones de lo real y la realidad misma ni se imagina la posibilidad de pretende reducir todo al ámbito del sujeto que conoce: conocemos cosas y las cosas son como las percibimos. 

 Principios
1) la especie humana varía de individuo a individuo y cada hombre no es hoy lo que fue ayer. No existe una igualdad biológica psíquica entre los individuos puesto que todos son distintos en cuanto a sus cualidades físicas o sus actitudes psiquicas. 
 Si todos los hombres son distintos, pero llegan a la misma afirmación respecto de algo percibido, es porque en este algo existen elementos estables no subordinados a las variaciones subjetivas. Es decir, si el sujeto fue es el factor determinante de lo que se conoce, habría una percepción distinta para cada sujeto y no sería posible la existencia de la ciencia. 

 Sí existe intersubjetividad de los objetos de la percepción y una ciencia común entre los hombres, es porque existen unos elementos reales que las percepciones reproducen parcial o totalmente.  Este elemento está dotado de cualidades que no se subordinan a la manera de ser del sujeto.

2) Si lo real pudiese ser reducido al pensamiento o a la idea no habría explicación posible para el error.  Es decir, si la idea y el objeto fueran una sola y misma cosa sería imposible concebir  una idea inadecuada, ya que está implicada su no correspondencia con el sujeto.

3) Existe Independencia entre la percepción y los objetos de la percepción. De ello resulta que los objetos observados en tiempos diversos y sujetos a múltiples variaciones, poseen un ser real no reductible a la conciencia que lo percibe. Por  lo tanto, el realismo se apoyan la tesis fundamental de que existe una correlación o adecuación de la inteligencia a “algo” como objeto de conocimiento. 


El Idealismo
El idealismo es la familia de teorías filosóficas que afirman la primacía de las ideas o incluso su existencia independiente.

Afirma que para comprender la realidad no alcanza con el objeto en sí que es percibido por los sentidos sino que es necesario tener en cuenta las ideas, los sujetos pensantes y el propio pensamiento.

El idealismo fue de gran influencia en el pensamiento filosófico a lo largo de la historia. Motivó a los pensadores a desconfiar de la percepción de sus propios sentidos para ampliar su capacidad de comprensión de la realidad.
Fuente: https://concepto.de/idealismo-2/#ixzz7Q9um5oun

El idealismo representa una posición radicalmente distinta a la que acabamos de ver. El idealismo de Platón (427- 347) podría llamarse idealismo trascendental o de la trascendencia. 

Para Platón las ideas representan la realidad verdadera, dirás que la realidad pies sensibles serían miras copias imperfectas. En el idealismo clásico la previa existencia de las ideas es la que condiciona la posibilidad de ser y conocer en el mundo empírico. De ahí la enseñanza de la Academia de qué las ideas son como el sol ilumina y torna visible las cosas. 

El idealismo moderno parque de la afirmación de qué las cosas no existen por sí mismas, sino en la medida y en cuanto sean representadas o pensadas. Sólo podemos hablar de lo que se inserta en el dominio de nuestro espíritu y no de las cosas como tales. Nada puede ser, sin ser necesariamente percibido o pensado. 

Se trata de la actitud opuesta al realismo para el que el conocimiento es una captación de la cosa, una aprehensión de lo real. En el idealismo se subordina todo a esquemas o formas espirituales, se declara que el hombre cuando conoce no copia una realidad exterior a él y que le viene nada, sino que crea un objeto con los elementos de su subjetividad.

El idealismo llega a afirmar que lo que se conoce no sol las cosas, sino las imagenes de las cosas (George Berkeley 1685-1753).  Hume decía que el hombre no conoce las cosas , sino la representación que nuestra conciencia elabora acerca de ellas.

Características del idealismo
Según el idealismo, la realidad se conoce por medio del intelecto y la experiencia.

Requiere del intelecto que le permite formar una idea determinada de las cosas que percibe a través de los sentidos.

La razón no se identifica con lo finito o material sino que alcanza lo infinito, como puede ser la concepción de la existencia de Dios.

La manera de conocer la realidad, es decir, a los objetos en sí mismos, es por medio del intelecto y a través de la experiencia.

No se conforma con lo que en apariencia perciben los sentidos sino que está ligado a una realidad superior de la consciencia del ser.


Fuente: https://concepto.de/idealismo-2/#ixzz7Q9vBVl3U
 

VERDAD —en griego   ALETEHIA
                      = quitar el velo del olvido, el velo que cubre (a la verdad) 

Cuando en la antigua Grecia, se entró en contacto con las culturas que poseían conocimientos y saberes técnicos (astronomía babilónica, arquitectura egipcia), buena parte de las explicaciones míticas entraron en crisis. Los griegos desafían las viejas explicaciones, las discuten y tratan de desvelar la realidad (aletheia, verdad en griego, literalmente, sin velo).
Cómo se hizo? Se quitaron los velos del mito usando el logos  (la razón). GERMEN DE LA ACTITUD CIENTIFICA

Nueva actitud ante el conocimiento de las cosas.

NO SE DAN EXPLICACIONES A PARTIR DE  RELATOS NO VERIFICABLES.  
LAS COSAS Y LOS HECHOS COMIENZAN A EXPLICARSE A PARTIR DE SU OBSERVACIÓN.

La realidad se explica a través de la observación.
Búsqueda de los primeros principios y las causas de las cosas.
A partir de la razón se llega a la abstracción, mediante  el cual se formulan conceptos universales que van más allá de los hechos particulares de las experiencias de la vida cotidiana obtenidos a través de los sentidos.

Los griegos se preguntaron porqué ocurren las cosas, de una visión mítica pasaron a una visión reflexiva sobre la realidad.

Ciencia especulativa, no teórica (excepto Pitágoras y Arquímedes).
Tales de Mileto, Anaximandro, Empedócles, Leucipo, Demócrito, Hipócrates.



LA VERDAD

En latín la palabra usada es veritās, de la cual derivan la palabra española verdad y sus afines en otras lenguas romances, 
como verità en italiano o verité en francés. En griego el término usado es alétheia (αλήϑεια), cuyo significado  etimológico es: sin velos, desvelada. Para el hebreo clásico el término אמןכה emuná significa primariamente «confianza», «fidelidad». 
El término hebreo אמת eméth (relacionado directamente con אמןכה/ emunah [actualmente se pronuncia emuná] ), a menudo traducido “verdad”, 
puede designar aquello que es firme, digno de confianza, estable, fiel, un hecho veraz o establecido.

La verdad, la verdad informativa, la objetividad  y el criterio ético del informador II
Brajnovic se propone demostrar que sin la verdad no hay información. Sostiene que el informador no puede ser cualquiera, sino una persona especialmente capacitada para ello.  Esa capacitación debe ser tanto individual como moral, pues solo quien sabe y conoce lo que sabe puede informar sobre algo. 

La diferencia principal que existe entre un hombre cualquiera y un periodista, en cuanto a su capacidad de captación de la verdad, radica precisamente en que en el informador no puede faltar ese “sentido” de lo que es verdadero. En esa capacidad de distinguir lo verdadero de lo falso, la realidad de la fantasía, radica la verdadera condición de periodista junto a la capacidad de transmitir un mensaje comprensible a través de los medios.


La verdad informativa es una verdad posible, humanamente alcanzable según las circunstancias, particularidades y condiciones en las que se encuentra la propia materia de la información en el momento de darla a conocer por el informador. 

Lo que hace accesible al destinatario de la información el contenido informativo es el lenguaje, que, para cumplir con su función, tiene que ser comunicable, es decir, conocido por parte del que se informa y conocido y usado correctamente por el que informa.

Como causa formal de la ciencia de la información, el lenguaje empleado bajo la forma de palabras, frases, signos, señales o símbolos, debe ser claro, seguro y coherente para proporcionar un saber o un conocimiento.  El mensaje informativo debe ser comunicable, suficientemente comprensible para los que lo reciben.

NOTIFICAR
El núcleo de la definición se encuentra en la afirmación que la información notifica  (hacer saber) hechos, datos, conocimientos, etcétera.  Etimológicamente hablando, la  palabra "notificar" deriva de los conceptos notus (conocer) y facere (hacer), lo que  literalmente podría recogerse como "hacer-conocer".
La información es inseparable de la verdad, de la mayor exactitud posible y de la  realidad que transmite o notifica.   Más aún, afirma el profesor español, si la  información no es veraz, o si carece de la mayor exactitud posible, no es información, aunque a veces reciba equivocadamente ese nombre.  De modo tal que todo aquello que sea falso, inexacto, engañoso o inexistente, no es ni será  jamás una información.

Ahora bien, no todo lo que tiene "forma" de información o su apariencia es una  información verdadera.  Ni tampoco todo lo que se transmite o se comunica por los  cauces y medios informativos es información. Veamos a continuación las principales características que debiera tener la  información auténtica:  a) Es verdadera o real; b) Es comunicable, lo que supone y  obliga a manifestar en su elaboración claridad en el lenguaje y correcta adecuación de  los símbolos empleados y c) Es comprensible o inteligible por el destinatario, puesto  que si el presunto receptor del mensaje informativo no lo capta, si no lo entiende , el  proceso resultaría incompleto .

La Verdad informativa y las causas de la Información
Sabemos que todo lo que existe tiene una causa; la causa material (lo que hace surgir o ser algo); la causa formal (lo que se recibe existiendo); la causa eficiente (lo que proporciona esta existencia) y la causa final (aquello por lo que se da o se justifica la existencia de algo).

Refiriéndose a la información, en su imprescindible obra "El Ámbito Científico de la Información", el profesor BRAJNOVIC sostendrá que a) La causa material es la verdad informativa, con respecto a una realidad, unos datos, conocimientos y opiniones; b) La causa formal es la comunicabilidad que incluye la claridad y, en su caso, la exactitud del lenguaje empleado en el proceso informativo; c) La causa eficiente es la necesaria comprensión o intelección del destinatario del mensaje informativo y d) La causa final (thelos) es la relación interpersonal entre el informador y el informativo para el mejoramiento cultural y del entorno del hombre y, por tanto, para el mayor progreso humano.  (BRAJNOVIC, L. 79:58).

Brajnovic se propone demostrar que sin la verdad no hay información. Sostiene que el informador no puede ser cualquiera, sino una persona especialmente capacitada para ello.  Esa capacitación debe ser tanto individual como moral, pues solo quien sabe y conoce lo que sabe puede informar sobre algo. 

La diferencia principal que existe entre un hombre cualquiera y un periodista, en cuanto a su capacidad de captación de la verdad, radica precisamente en que en el informador no puede faltar ese “sentido” de lo que es verdadero. En esa capacidad de distinguir lo verdadero de lo falso, la realidad de la fantasía, radica la verdadera condición de periodista junto a la capacidad de transmitir un mensaje comprensible a través de los medios.

La verdad informativa es una verdad posible, humanamente alcanzable según las circunstancias, particularidades y condiciones en las que se encuentra la propia materia de la información en el momento de darla a conocer por el informador. 

Lo que hace accesible al destinatario de la información el contenido informativo es el lenguaje, que, para cumplir con su función, tiene que ser comunicable, es decir, conocido por parte del que se informa y conocido y usado correctamente por el que informa.

Como causa formal de la ciencia de la información, el lenguaje empleado bajo la forma de palabras, frases, signos, señales o símbolos, debe ser claro, seguro y coherente para proporcionar un saber o un conocimiento.  El mensaje informativo debe ser comunicable, suficientemente comprensible para los que lo reciben.

La causa final de la información es el enriquecimiento cultural e intelectual, teórico y práctico del hombre y la sociedad.

La verdad informativa requiere la capacidad del hombre de diferenciar la verdad de la falsedad y eo ipso de conocer la evidencia objetiva, está garantizada por la conciencia reflexiva en el mismo acto de juzgar, es decir, por la llamada reflexión completa sobre su propia experiencia, sobre la experiencia de los demás, sobre las situaciones y circunstancias o sobre la analogía de las nociones conocidas. Habiendo admitido que es posible conocer la verdad y por lo tanto, la realidad de un objeto (Suceso, dato, hecho o saber), también se admite que la causa material de la información es la verdad sustancial de ese objeto suceso, dato, hecho o saber. Pero por qué? Lo es porque el contenido mismo de la información no puede ser otro que la verdad referida a una realidad sobre la que se informa.

Significa esto que para hacer por ejemplo, periodista hace falta un “sentido” o una capacidad especiales con las que los informadores captarían siempre la realidad la verdad sin riesgo de informar falsamente?

 Aunque se ha dicho muchas veces y de diversas maneras qué tal sentido y tal capacidad es imposible opino que no es así. El informador y por lo tanto el periodista que se dedica a la información tiene que saber sobre que informa que es lo mismo como decir que tiene que conocer y expresar la realidad que verdaderamente existe en el objeto sobre el que informa. Si no lo sabe, si no lo conoce, no puede informar. 

Si, pese a todo emplea las formas y métodos informativos para comunicar algo que desconoce o que no sabe, comete un fraude y un delito moral y profesional. Pero si lo conoce y lo sabe, quiere decir que tiene la seguridad de qué la materia sobre la que informa es ciertamente así como lo dice o transmite. 

La diferencia principal que existe entre un hombre cualquiera y un periodista, en cuanto a su capacidad de captación de la verdad, radica precisamente en que en el informador no puede faltar este sentido. No es, pues periodista aquel profesional que redacta perfectamente y que, quizás, usa los medios de comunicación social para transmitir sus ideas y sus reflexiones, o que redacta mejor que otros y que posee una curiosidad más o menos excepcional, sino aquel que además, sabe distinguir la verdad de la falsedad, la realidad de la fantasía o de las conveniencias ideológicas. 

Por consiguiente, no todo el mundo que usan los medios de comunicación social, puede ser informador en el sentido profesional y aún menos periodista, ni todo el mundo -por muy político ideológico- que sean ciertas personas puede autoritariamente ir formulando qué es y cómo debe ser la información.

La objetividad es inexistente fuera de todo aquello que deje de ser el referente, el objeto, ya que el momento en que se traslada a una noticia, que se convierte en referente, deja de ser objetivo. Desde el momento en que se relata un hecho, y no es él por sí mismo, hay subjetividad. Fatorello habla de una doble subjetividad en la noticia: la subjetividad que impone la elaboración del mensaje y, la que añade el receptor al Descodificar el mensaje que recibe. 

El fenómeno informativo se deriva del juego de las interpretaciones que dan lugar los hechos que lo conforman, ya que la la objetividad no aparece en sentido auténtico en ningún momento. Pero la objetividad plantea también un aspecto técnico, y la convierte en un hecho social intrínseco y cuantificable, como producto de consumo de la civilización actual. Este aspecto ha sido considerado por algunos sociólogos norteamericanos como la no intencionalidad del mensaje informativo. 

La no intencionalidad es una disposición psicológica del periodista, que existe, cuando los mensajes no resultan inspirativos, ni provocadores de respuestas concretas, ni agresivos, ni están cargados de intereses y propósitos previamente concebidos.

El mensaje periodístico será no intencional cuando al elaborarlo no se pretende más fin de informar al receptor y conseguir que adquiera un conocimiento claro y preciso de lo informal, sin la previa formación de ninguna opinión, que posteriormente se podría formar. Los mensajes sensitivos, por el contrario, tratan de hacernos conocer los hechos buscando nuestra participación: en la publicidad, propaganda y relaciones públicas predomina la incitación frente a la información. Este tema fundamentalmente moral, requiere un estudio sociológico o incluso jurídico para trascender el campo de la pura intencionalidad del redactor. Ángel Benito ha desarrollado una perspectiva mixta entre la filosofía y la teoría de la información. Para ello establece un cuadro de referencias ideológicas que recoge las distintas opiniones en una gama muy extensa, basados todos en el escepticismo ante la posibilidad de proporcionar informaciones perfectamente objetivas.


Dimensión de deontológica de la objetividad. 
Acabamos de ver como la exigencia de la información objetiva no tiene como base la adecuación con el objeto, si no la unicidad del sujeto informador, plasmada en los deberes éticos jurídicos. Sólo en estos términos es lícito hablar propiamente de objetividad informativa. La exigencia moral del periodista le impone para la consecución de una información precisa, exacta y completa, el respeto a la verdad y a la justicia como primero resultado. La verdad consiste en la adecuación del entendimiento con la realidad, labor que pertenece exclusivamente al informador, y que condiciona la objetividad y la credibilidad de la información

José María Desantes: “ el informador que tiene como hábito consecuente a su esfuerzo, el expresar correctamente la realidad aprehendida para comunicarla, es un informador verás la veracidad no es predicable de la información, ni del medio, como ordinariamente se hace. Es un deber y una virtud personales el informador que tiene como hábito, el aprehender correctamente la realidad que está fuera de él, la realidad objetiva, es un informador objetivo “ en la Cláusula de Conciencia Pamplona eunsa 1978.

Esta obligación moral supone la necesidad de estudiar y comprobar todos los datos y factores que encuadran el hecho noticiable. Respecto a la justicia, cabe decir que es un atentado contra el orden social no hacer uso de este deber, y cuando falta la justicia es la difusión de una información, se quebranta la libertad de los receptores.

Luka Brajnovic Incluye entre las obligaciones morales del periodista la objetividad informativa. Las obligaciones del periodistas son divulgar y difundir siempre la verdad, interpretar rectamente la opinión pública en general o la opinión postura o ideas de un grupo de la sociedad en particular, exponer sinceramente la información o la opinión propia sobre un hecho acontecimiento y servir al bien común.

El código internacional de ética periodística aprobado el 14 de marzo de 1952 por la Comisión de derechos humanos de la ONU expresan su artículo primero: “ el personal de prensa y de información debe hacer todo lo que esté a su alcance por asegurarse de que la información que recibe el público sea exacta en cuanto a los hechos. Debe comprobar todos los puntos de la información en la mejor forma que pueda. Ningún hecho debe ser voluntariamente deformado, y ningún hecho esencial debe ser deliberadamente suprimido “.



LA OBJETIVIDAD DEL MENSAJE INFORMATIVO

Dos cuestiones previas deben ser tenidas en cuenta a modo de premisa mayor:
a) si no hay un comportamiento profesional basado en el logro de la objetividad, no habra una verdadera noticia.

b) el concepto de objetividad aparece estrechamente vinculado a la distincion entre mensaje intencional y mensaje no-intencional

Bruce WESTLEY y Malcolm MCLEAN (Esquemas de estudio y modelos de comunicacion), senalan que un determinado relato de cierto acontecimiento podra ser considerado noticia, con toda precision y justicia, solo si ha sido elaborado por un emisor de mensajes colectivos con una evidente disposicion psicologica de no-intencionalidad.(MARTINEZ ALBERTOS, La Noticia y ..., 1978)

Hay que distinguir a estos emisores que ellos llaman codificadores, de otro tipo de emisores, denominados comunicadores.

El codificador es aquel emisor que actua con el proposito de ser, simplemente, un mediador entre el publico receptor de los mensajes y aquellos acontecimientos que dan origen a dichos mensajes.  El codificador funciona como un seleccionador de datos (gatekeeper) que los filtra y selecciona de acuerdo a su importancia y valor para la atencion de las demandas sociales del publico.

"Su papeles equivalente al de una cadena de transmision o un canal (channel roles) que amplia y hace mas extensas las posibilidades existenciales de los receptores". (MARTINEZ ALBERTOS, p. 82)

El periodista (codificador-mediador-canalizador) es un operador semantico que actua como un agente al servicio del publico, para seleccionar y transmitir no-intencionalmente mensajes que estan normalmente fuera del alcance del sujeto colectivo para quien trabaja. 

Para que haya noticia periodistica, el primer requisito es que unos emisores-codificadores seleccionen y difundan determinados relatos para hacerlos llegar a unos sujetos receptores, que aguardan dichos mensajes con la esperanza de hallar en ellos una satisfaccion inmediata o diferida de sus necesidades informativas, mediante la cual consiguen elaborar un cuadro de referencias personales validas para entender el contexto existencial en que viven.

La conversion de un hecho en noticia (acontecimiento que se transforma en relato) es una operacion linguistica gracias a la cual se sonsigue cargar de determinado significado a una secuencia de signos verbales. Esta es la tarea especifica de los periodistas, y en esta operacion linguitica existe siempre, necesariamente una dosis 
importante de interpretacion.

El segundo requisito de la noticia es que la difusion por parte de los sujetos emisores debe realizarse con animo de objetividad: la necesaria manipulacion interpretativa ha de llevarse a cabo con una evidente disposicion psicologica de no intencionalidad atribuible al codificador. 

ACOTACIONES AL CONCEPTO DE OBJETIVIDAD
1.- Es necesario tener en cuenta que no todos los mensajes periodisticos aparecen, ni deben aparecer, rodeados con el mismo grado de objetividad. No todos los mensajes periodisticos son iguales desde la perspectiva de su no intencionalidad. Es necesario reconocer la existencia de una gama escalonada de mensajes que se corresponden con los disntntos generos periodisticos.
Esta gama escalonada supone una progesion ascendente desde el mensaje mas aseptico y desinteresado (una nota o parrafo dentro del periodismo informativo) hasta el mas comprometido de los articulos del periodismo de opinion (un editorial advocatorio).
2.- El concepto de objetividad no puede quedar reducido a una vaga formulacion moral. La objetividad en la informacion de hechos no es una cualidad de la informacion misma exigible con referencia al objeto, sino una actitud de probidad exigible directamente al sujeto. (DESANTES)

LA OBJETIVIDAD EN EL MENSAJE PERIODISTICO
La objetividad es inexistente fuera de todo aquello que deje ser el referente, el objeto, ya que en el momento en que se traslada a una noticia (relato) deja de ser objetiva.  Desde el momento en que se relata un hecho hay subjetividad.

FATORELLO habla de una doble subjetividad en la noticia: la subjetividad que impone la elaboracion del mensaje  la que anade el receptor al decodificar el mensaje que recibe.  

El fenomeno informativo se deriva del juego de las interpretaciones a que dan lugar los hechos que lo conforman, ya que la objetividad no aparece en sentido autentico en ningun momento.

La objetividad periodistica es antes que todo una cierta disposicion psicologica del periodista, que se manifiesta, cuando los mensajes no resultan incitativos, ni provocadores de respuestas concretas, ni agresivos, ni estan cargados de intereses y propositos previamente concebidos.

El mensaje periodistico sera objetivo (no-intencional) cuando al elaborarlo no se pretende mas fin que informar al receptor y conseguir que adquier un conocimiento claro y preciso de lo informado, sin la previa induccion de ninguna opinion por parte del informador.

Los mensajes incitativos, por el contrario, tratan de hacernos conocer los hechos buscando nuestra participacion: en la publicidad, la propaganda, las relaciones publicas y el patrocinio predomina la incitacion frente a la informacion.

La posibilidad de que el periodista sea objetivo en su conformacion de la realidad a partir del conocimiento de ciertos hechos ha sido objeto de estudio para numerosos tratadistas del Periodismo.
a) DOVIFAT senala que la noticia es una comunicacion controlada y dirigida.  Puede que el periodico no sea objetivamente verdadero, pero si subjetivamente verosimil.

b) KAYSER: el narrador no es un robot y su sensibilidad afecta e inspira su vocabulario.  La informacion sera mas veridica cuanto mejor acompenada este de todos sus antecedentes.

c) FATORELLO: entiende la objetividad como neutralidad.

d) MARTINEZ ALBERTOS: La objetividad es un mito. La informacion nunca es exacta ni objetiva, es subjetiva. El enemigo de la informacion no es la interpretacion, sino las interpretaciones fragmentarias.

e) CLAUSEE: Diferencia entre el hecho y el acontecimiento informativo. Este ultimo consiste en un hecho de actualidad significativo, en el sentido de que influye en la vida personal y colectiva de los hombres.  El paso del hecho al acontecimiento informativo se consigue dando el contorno completo del hecho y analizando su contenido, sus antecedentes y repercusiones. Eso es la objetividad informativa. 

f) VOYENNE, las noticias son el resultado de un juicio. La objetividad es un acto de la inteligencia por medio del cual se construyen en el mundo exterior objetos delimitados, que mantienen una existencia distinta de la nuestra.

Frente a las posibilidades de hacer un periodismo objetivo, conviene tomar en cuenta:
* que la actualidad es una propiedad esencial de la noticia.  Esta proximidad a los hechos supone una fuente de errores de perspectiva que nunca puede superarse totalmente. El periodista tienen que saber esto y no precipitarse en afirmaciones tajantes o definitivas.
* La seleccion es tambien inevitable. Es utopico pretender decirlo del todo.
* Debe admitirse tambien un minimo de interpretacion personal, por muy partidario que se sea de la objetividad informativa.
* Tampoco tiene  la noticia porque ser siempre toma la postura del periodista. El reportero valora, interpreta, y sin embargo no debe comentar, no debe dar su opinion. Si lo hace tienen que advertirlo.
* Es inevitable tambien conceder a cada informacion un  emplazamiento determinado, asi como una cierta extension, que influirian  en al valoracion de la noticia.

Siempre en relacion con los enemigos de la objetividad ajenos al hecho informativo en si, la experiencia ha proporcilonado una amplia gama de intenciones y sentimientos del agente humano que capta y transmite la materia de una informacion.

a) la falta de veracidad consciente  buscada es lo mas opuesto a la objetividad informativa.  Este proceder es contrario no solo a la etica, sino a la misma naturaleza del periodismo.

b) es perfectamente superable la incorreccion o inexactitud en la informacion que se origina en la simple incomptencia o en el descuido.

c) el sensacionalismo es otra posible fuente de  atentados a la objetividad.
d) El periodista tiene la obligacion  de conocer sus tendencias, de advertir sus inclinaciones personales y reexaminar sus actuaciones si se ha enfrentado a los hechos precipitadamente  o sin la suficiente sangre fria. 
e) El tiempo tambien condiciona. En la carrera de la rapidez, la que pierde siempre es la verdad.
f) el espacio tambien condiciona las dimensiones de la objetividad.

ATRIBUTOS DE LA INFORMACION DIVERSOS DE LA OBJETIVIDAD
Quienes estiman en alto el valor de la prensa han encontrado y sostienen otros valores de la actividad periodistica.
a) Aunque pocos rechazan la trilogia clasica (informar, formar, entretener), algunos conceden a la formacion una preponderancia mayor incluso sobre la informacion. Sin llegar a la deformacion que pretende justificar la falsedad, algunos sostienen que la funcion periodistica consiste en orientar, en formar a la opinion publica.
b) el gran sucedaneo de la objetividad es, hoy dia, la honestidad.  Es honesto (segun BENITO): quien pone todos los medios para informarse bien; procura oir todas las versiones; no se calla nada de lo que ha percibido; rectifica cuando es necesario; no tergiversa lo que se opone a sus opiniones.

La objetividad es un problema de honestidad del informador. En sentido absoluto, la objetividad no puede darse, sin embargo, es una cualidad exigible en la noticia.
Luego, la objetividad tendra que entenderse como un comportamiento, un valor limite , un punto al que uno debe tenderse.

DIMENSION DEONTOLOGICA DE LA OBJETIVIDAD
Acabamos de ver como la exigencia de la informacion objetiva no tiene como base la adecuacion con el objeto, sino la honestidad del sujeto informador, plasmada en los deberes etico-juridicos. Solo en estos terminos es licito hablar propiamente de objetividad informativa.
La exigencia moral del periodista le impone para la consecucion de una informacion precisa exacta y completa, el respeto a la verdad y  a la justicia como primeros resultados.  La verdad consiste en la adecuacion del entendimiento con  la realidad, labor que pertenece exclusivamente al sujeto promotor de la informacion. 
"El informador que tiene como habito, consecuente a su esfuerzo, el expresar correctamente la realidad aprehendida para comunicarla, es un informador veraz.  La veracidad no es predicable de la informacion, ni del medio, como ordinariamente se hace... Es un deber y una virtud personales... el informador que tiene como habito el aprehender correctamente la realidad que esta fuera de el, la realidad objetiva, es un informador objetivo" (DESANTES, La Clausula de Conciencia, Espana, 1978)
Esta obligacion moral supone la necesidad de estudiar y comprobar todos los datos y factores que encuadran el hecho noticiable. Respecto a la justicia, cabe decir  que es un atentado contra el orden social no hacer uso de este deber, y cuando falta a la justica en la difusion de una informacion, se quebranta la libertad de los receptores.
BRAJNOVIC incluye entre las obligaciones morales del periodista la objetividad informativa. Las obligaciones del periodista son: 
a) divulgar y defender siempre la verdad.
b) interpretar rectamente la opinion publica en general o la opinion de un grupo especifico de la sociedad. 
c) Exponer sinceramente la informacion a la opinion publica, distinguiendo claramente sus opiniones personales.
d) servir al bien comun.

El Codigo Internacional de Etica Periodistica, aprobado el 14 de marzo de 1952 por la Comision de DDHH de la ONU, expresa en su articulo 1: "El personal de prensa e informacion debe hacer todo lo que este a su alcance por asegurarse de que la informacion que reciba el publico sea exacta en cuento a los hechos.  Debe comprobar todos los puntos de la informacion en la mejor forma que pueda. Ningun hecho debe ser voluntariamente deformado, y ningun hecho esencial debe ser deleberadamente suprimido". (Dicc.Per.p.73)

Por ultimo, podemos senalar unas consideraciones deontologicas en el mensaje interpretativo.  Este tipo de mensajes puede dar pie a manipulaciones, por lo que conviene conocer sus riesgos. MARTINEZ ALBERTOS senala tres puntos destacables en esta consideracion moral:
1.- La interpretacion periodistica responde a una actitud psicologica distinta de la opinion y el comentario. 
2.- Es un requisito la honestidad en el informador y el estudio del hecho y de todos los factores necesarios para la elaboracion de un correcto mensaje interpretativo.
3.-El profesionallismo del periodista es una garantia de confianza para los receptores.

VER CAPT 7 'LA OBJETIVIDAD' EN LA CONSTRUCCION DE LA NOTICIA DE M.RODRIGO ALSINA. (p. 165-180)


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Qué es la verdad. Ana Minecan
https://youtu.be/mFdodoe2XnU?si=EIaG8BjdFBEz08M7

LECTURA POST LECTIO
Cebrián Enrique, B. (2012). Al rescate de la verificación periodística
https://ojs.ehu.eus/index.php/Zer/article/view/10633


SEPTIMA SEMANA: La relación entre el periodista y sus fuentes.

  Los periodistas no son testigos de todos los acontecimientos o de los hechos que informan. Hay sucesos que se producen  sin que haya un pe...